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sábado,
02 de
junio de
2007 |
Argentino recibe a Barracas Central en la ida de la final
Pero lo de hoy es un desafío con proyección de futuro. Se trata del primer chico de la final del Reducido en busca de un lugar en la Promoción. No será a todo o nada, pero sí a cara de perro. La cita es en el Olaeta, a las 13, con el arbitraje de Carlos Stoklas.
A esta altura el envión anímico es para los dos, pero Argentino tiene a qué aferrarse. La victoria del pasado fin de semana ante Barracas Bolívar le sirvió al grupo para autoconvencerse de que el sueño del ascenso es posible, más allá, en caso de llegar, del obstáculo que será Defensores de Cambaceres.
Varios son los datos alentadores para el salaíto. La sobriedad y la paciencia mostradas en la semifinal son algunos de los más fuertes. Y allí deben apuntar todos los cañones, más si se tiene en cuenta que en esta instancia habrá posibilidad de revancha. Igual, el objetivo, después de ganar, claro está, no puede ser otro tratar de sacar la mayor diferencia posible.
Imposible obviar también el plus de poder mantener el equipo, más allá de que cuando la pelota empieza a rodar hasta el más mínimo detalle puede trastocar cualquier realidad.
El partido de 180 minutos comienza esta tarde y terminará el jueves, en cancha de Huracán. Quien haga mejor las cosas saldrá favorecido, pero si Argentino llegó hasta aquí es por algo. La virtud de sentirse capaz está a la vista y hoy es una buena chance para refrendarla. l
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