Editan "Pilgrimage", CD póstumo del saxofonista M. Brecker

"Pilgrimage", el disco póstumo del saxofonista de jazz Michael Brecker, fue editado mundialmente esta semana. El álbum, grabado cinco meses antes de su muerte, es el broche de oro que cierra una carrera musical ilustre y, seguramente, se convertirá en una de las grandes grabaciones de jazz de este año. La banda que acompañó en su última grabación a Brecker es inmejorable: Pat Metheny en guitarra, Herbie Hancock y Brad Mehldau en piano, John Patitucci en bajo y Jack DeJohnette en batería.

Michael Brecker murió el 13 de enero último producto de complicaciones ocasionadas por la leucemia. Su muerte estremeció a la industria discográfica y al mundo del jazz, dejando conmovidos a sus seguidores. La irreparable pérdida de este artista de talla mundial ocurrió en la cúspide de su capacidad creadora y como ejecutante, provocando un enorme vacío en los corazones de los músicos y melómanos de jazz.

Brecker fue dueño de un sonido único de su saxo tenor, a partir de un trazo melódico y a la vez agresivo, angustiado y urgente, con el que dibujaba líneas melódicas en extasiado fraseo, marcando todo un estilo sobre todo en la década del setenta. Fue sin duda el saxofonista más influyente y emulado, dentro y fuera del mundo del jazz, de los últimos diez años, después de íconos como John Coltrane y Wayne Shorter.

Brecker logró redondear una cifra cercana a los 900 discos como músico de sesión, junto a figuras tan disímiles como Frank Sinatra, Frank Zappa, John Lennon, Chick Corea, Lou Reed, Joni Mitchell, Don Cherry y Bruce Springsteen, entre tantos otros. Como solista y líder de sus propias agrupaciones, editó apenas 12 álbumes, sin embargo han sido más que suficientes para dar por sentada su magistral técnica y su depurado dominio del saxofón, dejando un rastro indeleble en la corriente del jazz conocida como mainstream.