Algunas sustancias contenidas en alimentos desencadenan migrañas

Entre los responsables figuran los conservantes, saborizantes y el jugo de naranja

Silvia Lo Presti / La Capital

A diferencia de la creencia popular que atribuye los dolores de cabeza a los problemas visuales, a trastornos del hígado o a las contracturas, hace tiempo que quedó demostrado que ninguno de ellos son culpables, y en cambio sí, un 20% de las migrañas tiene que ver con algunas sustancias contenidas en los alimentos. Por eso y con la intención de informar sobre la incidencia de lo que comemos en este trastorno, el doctor Federico Buonanotte, titular de la cátedra de Neurología de la Facultad de Medicina de Córdoba, presentará en Rosario una guía alimentaria para evitar que los pacientes pierdan tiempo y deambulen por los consultorios médicos en la búsqueda de un tratamiento que calme los dolores.

“No existe una dieta fija para pacientes con migraña”, aclara rápidamente el profesional en diálogo telefónico con La Capital. “Muchos alimentos inocuos pueden dispararle el problema a personas susceptibles a algunos de los grupos químicos contenidos en ellos”, dice y entre otros menciona el jugo exprimido de naranja, cuyo ácido ascórbico figura en las lista de las sustancias disparadoras de las cefaleas.

En general los tratamientos de prevención del dolor de cabeza comienzan por eliminar de la dieta diaria las frituras, el alcohol, los chocolates y los condimentos. Sin embargo, para Buonanotte, “no siempre hace falta prohibirlos”, porque según parece, la causa puede estar en vegetales como el tomate, la espinaca, la remolacha o la acelga; frutas como la banana, los cítricos, higos y frutillas, y hasta en las golosinas dietéticas.

“No es lo mismo que un hipertenso al que se le recomienda una dieta baja en sodio”, aclara el médico cordobés. “La migraña está determinada genéticamente y algunas sustancias actúan como disparadores. Lo ideal es enfocar el tratamiento con un nutricionista que irá quitando progresivamente de la dieta los alimentos por grupos químicos. Así, el profesional irá probando cada quince días, y en caso de no traer problemas, se vuelven a incluir”, explica Buonanotte.

Entre las sustancias sospechosas de disparar la cascada inflamatoria figuran los nitritos y nitratos, los sulfitos y sulfatos (se utilizan como conservantes o saborizantes), el aspartamo, el alcohol, las metilxantinas (como la cafeína, la teobromina del cacao y la teofilina del té) y el glutamato monosódico.

Sin embargo, no son sólo los alimentos responsables del intenso dolor de cabeza que se repite hasta dos veces por semana, que impide la vida de relación y que hace que la persona sólo busque reposo en un lugar oscuro. También puede ser la respuesta que elige el cuerpo para una situación estresante.

Por esto, y porque no existe un análisis o prueba diagnóstica que verifique su presencia, es que los médicos se encuentran frente a un problema complejo, que exige de un tratamiento interdisciplinario y de un imprescindible cambio de hábitos de vida.

La jaqueca o migraña es hereditaria y generalmente comienza en la adolescencia. Afecta más al sexo femenino (4 en 1) y es uno de los dolores que con más frecuencia obligan a la consulta médica. “Lleva tiempo encontrar la causa y puede ocurrir que nunca lo sepamos”, aclara el neurólogo.

Existen dos tipos de medicamentos para tratar el problema: los que se toman para calmar el dolor, y los preventivos, que evitan su aparición. Según el médico, “es mejor tomar una medicación preventiva, por un corto tiempo, que ingerir algunas drogas muy fuertes cuando aparece la jaqueca”.

El tratamiento se completa con actividad física, de relajación y esparcimiento. “La persona debe elegir lo que más le guste, no sirve obligarlo a hacer tal o cual cosa”, agrega. “Es necesario que el paciente se involucre en su tratamiento, no existe una pastilla mágica que resuelva el problema”, finaliza Buonanotte.

El neurólogo cordobés presentará su libro “Guía alimentaria para pacientes con migraña” el jueves 31 de mayo, a las 19, en el marco de una charla a la comunidad en el auditorio de la Fundación Villavicencio, Alvear 843. Previamente, el doctor Lorenzo Gardella, de Rosario, se referirá a los adelantos en diagnóstico y tratamiento. Ambos profesionales son miembros de la Asociación Argentina e Internacional de Cefaleas.

El neurólogo cordobés Federico Buonanotte.