Darán filme de curas pedófilos

El documental inglés será difundido por la RAI en Italia acompañado por la opinión de la Iglesia

La difusora radiotelevisiva estatal de Italia decidió ayer comprar a la cadena inglesa BBC un documental sobre abuso sexual de niños por parte de sacerdotes católicos, pero sólo permitirá que sea transmitido si se le acompaña con una opinión equilibrada por parte de la Iglesia.

El documental ha desatado una disputa política que enfrenta a dirigentes de derecha, que se oponen a la transmisión, contra los izquierdistas, que dijeron que censurarlo violaría la libertad de expresión.

Ayer el director general de la RAI, Claudio Cappon, aprobó la adquisición del documental, denominado "Sex Crimes and the Vatican" (Delitos sexuales y el Vaticano), pero estableció condiciones sobre cómo puede ser difundido.

Cappon exigió que el programa que presentará el documental, "Año Cero", también permita que importantes miembros de la Iglesia den su versión de los acontecimientos y desafíen las aseveraciones de la película.

Michele Santoro, un periodista italiano de izquierda, había planeado originalmente poner el documental al aire mañana, pero ahora postergará la transmisión.

La solución no satisfizo a Mario Landolfi, un político de derecha que encabeza la comisión de supervisión de la emisora en el Parlamento y conduce la campaña para prohibir el documental.


Como Poncio Pilatos
Landolfi acusó al director Cappon de lo que llamó una solución a lo Poncio Pilatos refiriéndose al caso del gobernador romano que se lavó las manos por la muerte de Jesucristo

"Esto permitirá un juicio mediático contra la Iglesia Católica", dijo Landolfi.

El documental fue difundido en la BBC en octubre, pero nunca en Italia, aunque los bloggers lo han traducido y ahora se ubica como uno de los artículos más populares de Google Video Italia (www.video.google.it).

Grupos críticos de la Iglesia también enviaron a los medios, a través de correos electrónicos, el enlace al video.

La poderosa Iglesia Católica ya ha condenado el documental y Avvenire, el periódico de la Conferencia Episcopal Italiana, acusa a los bloggers que pusieron la película en internet de esparcir "calumnias infames". l (Reuters)