Violaciones a las leyes y una guerra de denuncias

La Campaña Brady, una ONG que es enemiga declarada de la mayor lobbysta de las armas -la NRA (Asociación Nacional de Rifle)- informó que el titular de esta última, Sandy Abrams, debió renunciar a inicios de año a su cargo luego de verificarse 900 violaciones a las leyes federales en su armería de Baltimore. La NRA defendió hasta último momento a Abrams. Su negocio fue cerrado, pese a que los abogados de la asociación llevaron el caso a tribunales, pero la clausura fue ratificada por una cámara de apelaciones.

La Campaña Brady acusa a la NRA de "atar de manos" a la agencia federal de control de armas, la ATF, para evitar el refuerzo de las normas federales sobre el control. La ONG denuncia que en EEUU se experimenta la más fuerte ofensiva contra las limitaciones a las armas en dos décadas, y cita como ejemplo la norma federal HR 5092, que protegería a los traficantes condenados reincidentes, como el ex presidente de la NRA, Sandy Abrams. "Si la HR 5092 se transforma en ley, sería eliminada la capacidad de la ATF para revocar licencias de venta de armas", denunció.


Misuri armamentista
El pasado 13 de abril el gobernador de Misuri Matt Blunt firmó una ley que garantiza a todos los ciudadanos del Estado mantener sus respectivas armas las cuales no podrán ser incautadas por las autoridades en casos de emergencia

Por miedo a un incremento de los actos criminales poco antes del paso del Katrina, las autoridades de Misuri confiscaron cientos de armas, que comenzaron a devolver a sus propietarios el año pasado, después de que dos asociaciones defensoras de la tenencia de armas se querellaran contra el Estado.