|
miércoles,
18 de
abril de
2007 |
El control de armas parece
una batalla perdida en EEUU
n n Los partidarios de limitar su uso se enfrentan a grandes lobbies y numerosos obstáculos
Washington. - A pesar de la violencia y de los cada vez más frecuentes tiroteos en las escuelas, los partidarios del control de armas en EEUU luchan contra un lobby cada vez más poderoso, y lo concreto es que consiguieron muy pocos avances desde la famosa masacre de Columbine, hace ocho años. Ahora se enfrentan a nuevos obstáculos tras la matanza en la Universidad Tecnológica de Virginia.
"No es muy atractivo (en el Congreso)", admitió la representante demócrata Carolyn McCarthy, la partidaria más ardiente en la Cámara baja de una ley de control de armas. McCarthy fue elegida con una campaña antiarmas en 1996, tres años después de que su esposo fuese asesinado por un hombre armado en un tren en Long Island, Nueva York.
En 1999, luego de que la masacre en la secundaria Columbine dejase 15 muertos, incluidos los dos autores, legisladores presentaron infructuosamente decenas de leyes para prohibir el uso de armas por niños, prohibir ventas especiales de armas y aumentar la edad mínima para la compra.
"Los controles de armas no alcanzan", se quejó ayer el senador demócrata Ted Kennedy. Sin embargo, el presidente Bush deslizó que "la gente tiene el derecho a portar armas".
Debate
El poderoso lobby armamentista NRA Asociación Nacional del Rifle opinó que el asesino múltiple podría haber sido detenido si la institución escolar no hubiera sido una zona libre de armas un estudiante o un docente podrían haber reducido violentamente al atacante asegura el grupo
Por otro lado, Josh Horowitz, de la Coalición para la Lucha contra la Violencia Armamentística, estableció una relación entre la masacre universitaria y las leyes liberales de Virginia sobre armas. En los Gun Shows (exposiciones de armas) cualquiera puede adquirir armas sin complicaciones. Si la policía lo autoriza también se pueden portar armas en la vía pública.
El asesino serial de Virginia habría usado pistolas semiautomáticas. En 2004, el Congreso estadounidense rechazó la extensión de una prohibición de compra -sobre todo con votos de los republicanos- de este tipo de armas.
"Qué deprimente que ni siquiera hayamos podido desterrar estas armas asesinas", opinó el presidente de la Campaña Brady contra la Violencia Armamentística, Paul Helmke. En el interín hay proyectos de ley de los demócratas, presentados al Congreso, para reforzar los controles sobre armas. "Si no resulta ahora, tras la matanza más horrible de la historia, ¿cuándo?", preguntaba Helmke sin optimismo, porque las perspectivas de un mayor control de armas parecen desalentadoras.
Apenas este fin de semana pasado, la NRA celebró junto a unos 60.000 miembros en Saint Louis sus éxitos "para la libertad", una forma de referirse a la obstaculización de estos controles. Hace poco, un tribunal en Washington frustró una de las pocas leyes estrictas sobre armas en EEUU, y reinstaló el permiso de tenencia de armas de fuego dentro de viviendas particulares. El lobby representa a 4,2 millones de miembros.
Pocas chances
Los demócratas saben de la fuerza de la NRA no olvidan las experiencias de Al Gore que en la contienda electoral de 2000 se pronunció a favor de leyes más duras sobre armas luego de la masacre de Columbine Según analistas esta postura le costó a Gore votos decisivos sobre todo en áreas rurales
Ahora, aunque los demócratas controlan el Congreso, muchos de sus nuevos miembros son también legisladores de estados rurales, donde el apoyo a la tenencia de armas es grande.
enviar nota por e-mail
|
|
|