En la cumbre de los aceiteros se debatió sobre los límites de la bioenergía

No todo lo que brilla es oro en el negocio del biocombustible

Advierten sobre los riesgos de sobredimensionar las oportunidades

Fabiana Monti / La Capital

El raciocinio pareció prevalecer por sobre el boom de los biocombustibles entres los especialistas del sector aceitero que se nuclearon la semana que pasó en la tercera edición el Seminario Ciara-Cec 2007 bajo el lema "Alimentos y energía: los nuevos escenarios para la Argentina". Advirtiendo sobre los riesgos de que la bioenergía pueda convertirse en una burbuja como lo fueron hace unos años las empresas punto.com y poniendo paños fríos sobre el tema, los analistas internacionales sorprendieron a un auditorio que en la Argentina se saborea con los beneficios que puede aportar esta nueva veta al negocio.

Pero no sólo la señal de alerta apuntó a la mirada estratégica sobre el negocio sino, además, sobre los problemas limitaciones concretas que puede tener. Por caso, explicaron que el aumento de las materias primas puede ser una amenaza para el biodiesel y por tanto aconsejaron "tener una mirada fría" sobre el tema.

El interés sobre el desarrollo de los biocombustibles fue excluyente en el encuentro que tuvo lugar en el Hilton de Buenos Aires, con un auditorio a pleno conformado por empresarios ansiosos de escuchar sobre esta nueva veta del negocio aceitero que tiene convulsionado el mercado de los commodities agropecuarios.


Advertencias
La primer advertencia vino de boca del holandés Loek Boonekamp, director de Mercados y Comercio Agrícola de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (Ocde), el centro de estudio del club de los países ricos. El analista señaló que "la suba del maíz tiene más que ver con que los stocks están bajando que con la fuerte demanda de etanol", y paso seguido disparó: "Hay demasiada euforia con respecto al mercado del etanol".

En ese sentido, Boonekamp fue categórico al resaltar que "las políticas energéticas pueden generar distorsiones en los mercados agrícolas ya que genera precios más altos e inestables".

El analista explicó -tratando de aquietar las aguas con respecto a las grandes expectativas que generan los biocombustibles- que "los gobiernos se entusiasman demasiado con lo que sucede en ese mercado" y en respuesta a una pregunta del público consideró que podría suceder con este fenómeno algo similar a lo que aconteció con las empresas punto.com.

Para el especialista holandés el único país capaz de producir etanol sin subsidios es Estados Unidos y se preguntó acerca de la "sustentabilidad" de la expansión de este tipo de combustibles cuando se requiere tanta superficie. También cuestionó el futuro de la producción de etanol en base a maíz cuando los investigadores terminen de desarrollar sus trabajos de pesquisa para producir biocarburantes a base de celulosa.


Alza de precios
En tanto, el portugués Pedro Sampaio Nunes, director ejecutivo FirstForce, Sociedad de Desarrollo de Biocombustibles comenzó su análisis apuntando que el aumento de precios de las materias primas que, según dijo, serán una amenaza para la producción de biodiesel.

No obstante fue mucho más optimista que Boonekamp al indicar que las políticas de impulso al sector tendrán como grandes beneficiarios a países en vías de desarrollo como Brasil o la Argentina, productores de materias primas y con grandes posibilidades de aumentar su producción agrícola.

"Para el año 2010, la Unión Europea pretende llegar a las 12 millones de toneladas de producción de biodiesel, lo que significará una producción de 20 millones adicionales de toneladas de semillas", dijo el especialista. En ese sentido, como se trata de un objetivo imposible de cumplir por parte del viejo continente, los europeos deberán importar mercadería de países como Argentina.

Desde la India, Dorab Mistri, director de Godrej Internacional anticipó un momento de "prosperidad agrícola" al menos hasta el año 2010, que también abre un horizonte de oportunidades para Brasil y Argentina y le puede generar riquezas a la industria aceitera por 10 mil millones de dólares.

"Un sector agrícola crea riqueza para toda la Nación. La Argentina está en la cresta de la ola y se le debe permitir estar allí", advirtió el indio.

Para Mistri, el aumento de la demanda proviene de lo que denominó como las "tres p: población, prosperidad y petróleo" y estimó que hacia el 2010, la demanda de aceites vegetales en el mundo se incrementará en 25 millones de toneladas.

"La palma puede aportar 11 millones, la colza 5 millones, el girasol 1 millón y otro tanto el maní y el algodón", pronosticó.


La oferta y la demanda
Con esas proyecciones, se producirá "una brecha entre oferta y demanda de entre 7 y 8 millones de toneladas de aceite, que probablemente debamos cubrir recurriendo a la soja", con lo cual se abre una posibilidad de mejorar su producción en Argentina y Brasil.

Al respecto, el analista observó que Brasil "podrá expandir la oleaginosa si los valores no aumentan más allá de los precios actuales y si el real no se fortalece un poco", en tanto que la Argentina "deberá decidir si la producción adicional es por la expansión de cultivos o por mejor tecnología".

En ese sentido, Mistri se preguntó si el gobierno argentino creará las condiciones para el incremento a escala masiva del cultivo de la oleaginosa y advirtió que "la intervención del gobierno mata la gallina de los huevos de oro".


La interferencia política
"Los políticos creen que pueden diseminar puestos de trabajo con más rapidez que el sector privado y no se dan cuenta de que la interferencia política termina diseminando la pobreza antes que la prosperidad", concluyó.

De todas maneras, el analista indio hizo una apreciación para el público argentino, en el sentido de que la soja es una de las materias primas que menor aceite produce para biocombustibles y aseguró que el país "era demasiado conservador en materia de cultivos" habida cuenta que son "adictos a la soja".

Precisamente uno de los interrogantes que quedó flotando en el aire es el boom de los biocombustibles en el mundo está liderado por el etanol y por ende por el maíz en tanto que la Argentina está tratando de sumarse a ese tren a través de la soja. El tiempo dirá cual serán sus resultados.

Roberto Padilla habló sobre las inversiones en el sector.