Inter quedó afuera. En el final, Burdisso, quien sufrió la fractura del tabique, se trenzó a golpes con Navarro

Liga de Campeones: eliminación y bochorno

Inter quedó afuera de la Champions League a manos de Valencia en medio de un escándalo generalizado entre los jugadores de ambos equipos. Los italianos empataron sin goles, en el estadio de Mestalla, pero lo que pasó al final del partido excede holgadamente el resultado que sepultó las esperanzas de los interistas.

Uno de los principales perjudicado con la gresca del final fue el argentino Nicolás Burdisso, quien reaccionó violentamente contra Carlos Marchena, suplente de Valencia. El ex defensor de Boca terminó con el tabique nasal fracturado como consecuencia de los golpes que sufrió. Sin que nada lo hiciera prever, y con el encuentro ya terminado, Burdisso perdió la cabeza ante una presunta provocación de Marchena. Pero la trifulca no terminó ahí ya que David Navarro se metió y golpeó al defensor argentino, lo que motivó que el Jardinero Julio Cruz y el colombiano Iván Córdoba persiguieran al jugador valenciano con puntapies y patadas voladoras.

Se desnaturalizó todo de tal manera que el campo de juego se transformó en un verdadero ring. Empujones, patadas al aire y puñetazos eran los dominadores de la escena. Con jugadores reaccionarios y malintencionados.

Si bien los incidentes se produjeron cuando la clasificación de Valencia era un hecho, el ambiente entre los jugadores ya venía muy caldeado durante el partido. Bastó que el árbitro señalara el final para que se desatara la batalla campal en el círculo central.

La policía estableció rápidamente una barrera de separación en el túnel de los vestuarios, para que el escándalo no sea más grande. Pero no hubo prevención que valga.

Es que los incidentes se prolongaron en el túnel. En ese sector, y medio de una marea de insultos, los jugadores de Inter fueron a buscar al presunto agresor de Burdisso y tuvieron que ser separados por personal de seguridad de la entidad española para evitar males mayores.

En los camarines los más exaltados fueron los argentinos Esteban Cambiasso y Julio Cruz, y el colombiano Iván Córdoba. Los tres quisieron hacer justicia "por mano propia" y buscaron romper la puerta del vestuario local para enfrentarse cara a cara con Navarro.

De acuerdo a algunas versiones, el arquero Francesco Toldo sí ingresó al vestuario de Valencia, aunque fue contenido por Roberto Ayala para que no agreda al jugador español.

La policía española, nuevamente, se vio obligada a intervenir, dispersó a los futbolistas revoltosos y custodió la salida del micro que transportaba a los jugadores italianos, que abandonaron el estadio de Mestalla casi dos horas después de que el partido finalizara.

Inter quedó eliminado de la Champions entre manotazos y patadas voladoras, con Burdisso seriamente lesionado y con un grupo de jugadores que perdieron la cabeza por la impotencia de no saber dar vuelta el 2 a 2 del primer partido, jugado en Italia.