Evo expropió un complejo industrial de capital suizo

n n Bolivia no pagará indemnización. La firma tuvo entre sus dueños a Gonzalo Sánchez de Lozada

Vinto, Bolivia. - El presidente Evo Morales ordenó la "recuperación" de la metalúrgica Vinto, de propiedad de la empresa suiza Glencore y que perteneciera al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada. Morales no pagará indemnización a los dueños. El acto no estuvo exento de tensiones con los trabajadores, y el gobierno debió recurrir a la fuerza militar.

En Vinto, al sur de La Paz, Morales firmó el decreto que otorga al Estado el control del complejo metalúrgico local. Previamente, un fiscal acompañado de decenas de militares enviados a la zona, ordenó abrir las puertas de la fundidora, ante la resistencia de los trabajadores de Glencore, que tiene una plantilla de 450 empleados.

Morales, quien no mencionó la posibilidad de indemnizar a Glencore, dijo que la empresa fue constituida al costo de 10 millones de dólares, en los años 70, y que luego fue "rematada" a 6 millones en 2003.


Convenio violado
Poco antes de la firma del decreto el representante de Suiza en Bolivia Thomas Henschel había dicho en La Paz que esperaba que el gobierno de Morales respete el convenio bilateral de protección de inversiones que existe entre su país y Bolivia

Ante los trabajadores de Glencore, Morales pronunció un encendido discurso contra el "neoliberalismo" y por "la nacionalización de todos los recursos naturales del país", en el marco de su política "antiimperialista". Más concretamente, les aseguró a los preocupados trabajadores que sus puestos están asegurados en la nueva gestión estatal.

Morales insistió en que el traspaso de Vinto a Glencore por parte de la Compañía Minera del Sur (Comsur) en 2003 fue fraudulenta. Señaló que el "saqueo" se inició en 2001, cuando el gobierno de entonces vendió el complejo de Vinto a una firma estadounidense, que a su vez traspasó sus acciones a Comsur. Esta tuvo entre sus socios al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, quien vendió sus acciones a la empresa suiza en 2004, después de ser forzado a renunciar, en octubre de 2003, por una violenta revuelta que dejó 60 muertos y que tuvo a Evo Morales entre sus líderes. Morales señaló que "todas las empresas" que fueron de Sánchez de Lozada serán nacionalizadas.

Antes, el ministro de Minería, el ex minero José Dalence, advirtió que el gobierno no aceptará presiones de "ninguna embajada", en aparente alusión a la misión suiza, que ya en diciembre manifestó preocupación cuando Morales hizo el primer anuncio de que tenía en sus planes la expropiación de Vinto.

Nacionalizado. Morales debió recurrir al Ejército para entrar en la planta ante la resistencia de los obreros.