Los problemas de crecimiento

Rosario sufre una real crisis producto de su acelerado crecimiento y las autoridades provinciales y comunales no lo afrontan. Se echan culpas recíprocas, pero de soluciones en sus respectivos ámbitos, para atender las serias consecuencias de un inminente colapso de los servicios de electricidad y agua, poco de poco o nada de nada. Los rosarinos podemos estar orgullosos del acelerado progreso de nuestra ciudad, pero lamentablemente parecemos cegados, ignoramos la realidad y “bailamos sobre la cubierta del Titanic”. Es cierto que el problema de los servicios tiene solución, la misma es la de inversión y ella corresponde a la Provincia; pero la inversión supone, de concretarla, resultados a no menos de tres años y, en el mientras tanto, la intervención de las autoridades comunales es tan imprescindible como urgente. Puede parecer contrario al desarrollo, pero resulta necesario suspender las autorizaciones de construcción de nuevos edificios. Los sectores interesados, llámense inversores, empresas constructoras, proveedores, gremio, profesionales, inmobiliarias, escribanos etc. etc., no sufrirán una crisis ya que han sido altamente beneficiados en estos últimos tres años. Además continuaría la actividad, ya que hay actualmente muchos edificios están en plena construcción. Finalmente, no podemos ignorar y debemos exigir soluciones, ya que de continuar sin inversiones en los servicios públicos básicos y no frenar el gigantismo inmobiliario asistiremos inevitablemente al deterioro creciente de nuestra ciudad y consecuente calidad de vida de los rosarinos.

Juan Carlos Romano

DNI 3.690.388