Petróleo y pobreza

Turkmenistán, país desértico pero rico en materias primas, se encuentra entre el mar Caspio y Afganistán, y posee fronteras comunes también con Uzbekistán, Kazajstán e Irán. Con una superficie de 488.100 kilómetros cuadrados, alrededor del doble de Gran Bretaña, tiene una población de apenas cinco millones de habitantes, el 90% musulmanes sunitas. El desierto de Karakum cubre cuatro quintos de la extensión del país, pero aún hoy transcurren importantes vías de tráfico a lo largo de las antiguas rutas de la seda. En Turkmenistán se supone la presencia de gigantes existencias de gas y petróleo. Ya hoy el gas y el crudo constituyen una gran parte de las exportaciones, cuyos principales receptores son Ucrania y Rusia. De todas formas, los ingresos parecen haber caído en los bolsillos de Niyazov, ya que la mitad de los turcomanos vive bajo el umbral de pobreza.