La ONU condena el embargo de EEUU a Cuba en una votación récord

Naciones Unidas.- La Asamblea General de Naciones Unidas pidió a Estados Unidos levantar su embargo económico de 44 años contra Cuba, en una votación récord de 183 contra cuatro y una abstención.

Es la decimoquinta vez que la ONU condena las sanciones estadounidenses contra Cuba.

Cuba aplaudió el resultado como una victoria diplomática en su campaña contra el embargo impuesto en 1962, que, según sus cálculos, le costó más de 4.000 millones de dólares durante el último año.

“La guerra económica desatada por Estados Unidos contra Cuba, la más prolongada que se haya conocido, califica como un acto de genocidio y constituye una violación flagrante del derecho internacional”, dijo el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, durante un discurso ante la Asamblea General de la ONU en Nueva York.

Estados Unidos, Israel y las islas Palau y Marshall votaron contra la resolución. Micronesia se abstuvo y algunas naciones como Nicaragua o Irak no votaron.

En el 2005 las sanciones estadounidenses fueron condenadas en la ONU por 182 países contra esos mismos cuatro.

Pérez Roque dijo a la Asamblea General el embargo afecta a empresas de terceros países que hacen negocios con la isla de gobierno comunista.

“El bloqueo persigue a empresas de otros países, no sólo de Norteamérica, que intentan realizar inversiones en Cuba”, dijo.

Estados Unidos ha endurecido el embargo con la esperanza de socavar el gobierno de la isla en momentos en que el líder Fidel Castro lleva 100 días alejado del poder por razones de salud.

El representante estadounidense, Ronald Godard, dijo que las sanciones eran un asunto bilateral entre Cuba y Estados Unidos que no debía ser discutido en la ONU.

“Mantenemos el embargo para que los beneficios de las ventas de medicinas y alimentos estadounidenses vayan al pueblo cubano”, dijo.

El canciller cubano criticó además una enmienda presentada por Australia, que argumentó que las sanciones estadounidenses son motivadas por “preocupaciones válidas” sobre la falta de libertad en la isla. Según datos extraoficiales, en Cuba hay alrededor de 300 presos políticos.

Pérez Roque dijo que la enmienda, rechazada por 126 votos contra 51, fue una maniobra diseñada por Washington para boicotear la condena al embargo.

“Australia no tiene autoridad moral para hablar de derechos humanos en Cuba. El gobierno australiano es cómplice del imperialismo de Estados Unidos. Es una especie de imperialismo de bolsillo”, dijo.

En La Habana, el gobierno cambió un centenar de banderas negras que ondean frente a la Sección de Intereses de Estados Unidos por enormes pabellones cubanos.

Según Cuba, el 70 por ciento de sus 11 millones de habitantes nacieron desde que el país es sometido al cerco económico.

Sin embargo, la decimoquinta condena de la ONU al embargo no pareció alterar la rutina en las calles de La Habana.

“No va a cambiar nada, aunque pienso que Estados Unidos tendrá que escuchar algún día”, dijo Iván Remedios, un artesano de 29 años.

Otros fueron más optimistas. “Yo considero que sirve mucho. Es hora de que se den cuenta que la política que aplican desde hace tanto tiempo contra Cuba es arcaica. Acaba de demostrarse en esta nueva votación”, comentó Edilberto Ochoa, de 66 años.

El gobierno cubano dice que el embargo frena el desarrollo del país y somete a sus habitantes a privaciones económicas.

El representante estadounidense Godard dijo que el gobierno cubano debería poner en práctica “reformas de libre mercado” en lugar de culpar a Estados Unidos por sus problemas económicos. (Reuters)