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lunes,
06 de
noviembre de
2006 |
Argibay insiste en que se defina el número de jueces de la Corte
Buenos Aires.- La jueza de la Corte Suprema Carmen Argibay volvió a reclamar hoy que “se defina” el número de jueces con que contará el alto tribunal y se pronunció a favor de una reducción de nueve a siete.
“La reducción nos parece muy bien, ya lo hemos dicho. Pero en este momento me preocupa más que nos den el número que tenemos que tener, porque en la situación en que estamos no podemos formar mayorías”, analizó la magistrada.
En la actualidad, la formación de la corte es de nueve miembros pero desde hace un año hay dos vacantes que la reducen a siete; no obstante, para emitir un fallo es necesaria una mayoría de cinco votos.
Argibay se inclinó por una modificación legislativa que reduzca el número de jueces de la Corte, incrementado a nueve durante la presidencia de Carlos Menem: “Si quieren bajarlo a siete, encantados, porque siete causan menos problemas que nueve en cuanto a la demora” en resolver expedientes.
Por otra parte, Argibay consideró improbable que la Corte Suprema se pronuncie antes de mediados de noviembre sobre la ley que reformó el Consejo de la Magistratura, reduciendo su cantidad de integrantes y alterando la proporcionalidad de las representaciones.
La jueza indicó que el expediente planteado por una agrupaciòn de abogados está “a estudio de la Procuración General de la Nación”, paso previo a que la Corte se dedique de lleno a su estudio.
“Después que la Procuración se pronuncie el expediente deberá circular entre todos los jueces de la Corte”, por lo que Argibay consideró que difícilmente haya un fallo antes de que el 17 de noviembre próximo comience a funcionar el nuevo Consejo, con 13 miembros.
Argibay admitió que aun cuando comenzara a funcionar con la nueva estructura, la Corte podría declarar la inconstitucionalidad de la ley que reformó el Consejo.
“Podría ser que volviera a la formación anterior”, dijo, a modo de posibilidad.
Argibay comentó con “una sensación de tristeza” el informe de la organización Transparencia Internacional sobre la corrupción en la Argentina y el contenido crítico sobre el funcionamiento de la Justicia.
En lo específico de la Justicia, evaluó que “en muchos casos el problema de los tiempos se debe a cuestiones de infraestructura o falta de integrabción de los tribunales”.
“Hay una enorme cantidad de vacantes en los puestos judiciales cubiertos por jueces subrogantes. No se terminan de llenar las vacantes a veces por demoras en el Consejo, en otros por culpa del Ejecutivo que no manda los pliegos y en otros, del Senado que no trata los pliegos”, explicó.
Pero además, destacó el “aumento de la litigiosidad de forma exponencial”, que se traduce en un “crecimiento increíble de número de causas y hace años que no se modifica la estructura judicial”.
Finalmente, Argibay rechazó la posibilidad de reducir la edad de imputabilidad de los menores: “no hay que bajar la edad, está bien como está”.
En ese contexto, rebatió uno de los argumentos de quienes impulsan la reducción de la edad de imputabilidad, cual es la imposibilidad de la familia de albegar a un adolescente en situación de riesgo con la ley.
“Si la familia no está en condiciones de contenerlo, no se lo van a devolver. Conozco a los jueces de menores y sé lo que hacen. Lo más probable es que ese menor vaya a un instituto durante mucho tiempo”, analizó Argibay. (DyN)
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