|
lunes,
06 de
noviembre de
2006 |
Sectores. Las pequeñas empresas comienzan a quedar relegadas frente a costos y precios en alza
Las pymes industriales empiezan a perder protagonismo
El último relevamiento de Observatorio Pyme habla de las amenazas que presenta el sector en la actual coyuntura
Sandra Cicaré / La Capital
¿Estamos ante un eventual desplazamiento de las pymes industriales del mercado? La pregunta, tan directa y por momentos inquietante, es la que se realiza el último estudio de coyuntura del sector elaborado por la Fundación Observatorio Pyme, basada en datos concretos de la realidad que están viviendo las pequeñas y medianas empresas caracterizada por un "estancamiento de la producción y una aceleración de los costos y precios".
Según la información compilada en la segunda encuesta coyuntural de 2006 a pymes industriales, la entidad sondea sobre el papel que cumple este sector productivo en lo que denominan el "segundo round" del proceso de crecimiento, aquel que debe encarar la economía para despegarse de las ventajas que trajo aparejada la devaluación y avanzar en forma más genuina. Y los resultados no son demasiado alentadores para las pymes industriales.
Según expresa Vicente Donato, director de la fundación, "el crecimiento actual observado en la producción industrial ya no está tan difundido entre los sectores como en los tres años pasados, sino que se debe en un 50% al impulso de sectores industriales donde las pymes tienen muy poca presencia, como el caso de vehículos automotores o minerales no metálicos".
Para graficarlo hace referencia a el "nerviosismo" que se observa en el sector textil que podría generalizarse a otros rubros.
El principal cuello de botella que en este escenario - y tras haber abrevado de los beneficios de la era posconvertibilidad- es la diferencia entre costos y precios. Mientras unos aumentan, los otros lo hacen pero a menor ritmo.
Los números revelan una desaceleración del crecimiento de la producción en las pymes respecto de la actividad industrial a nivel país, un fenómeno que se replica también en la creación de empleo.
Los números
Aunque aún los niveles de utilización de capacidad instalada sigue elevado en el segmento de pymes industriales -78,7% en segundo trimestre de este año contra 74,4% del mismo período del año anterior- y la ocupación también -creció 4,4% entre el primer semestre de 2005 y el mismo de 2006-, la performance es menor a la de toda la industria, que creció al 5,5% en el mismo lapso.
Frente a eso, desde Observatorio Pyme se pregunta si la Argentina puede repetir la experiencia chilena, donde las pymes industriales fueron desplazadas del mercado por las grandes empresas o si en todo caso esto es un anticipo de experiencias anteriores registradas en el país donde hubo un corrimiento del sector productivo de la escena grande de la economía.
Donato señala que "los datos muestran el perfilarse de dos economías y dos inflaciones y por tanto, estamos ante la presencia de un problema de competitividad que no se resuelve simplemente con la vigencia del tipo de cambio alto".
Según el relevamiento, el "alto nivel de actividad" que aún registran las pymes contrasta con "el menor crecimiento de la facturación" en los últimos trimestres. "Mientras que en el segundo trimestre de 2005 la facturación crecía en términos interanuales a un 24% en el tercer trimestre de ese año lo hacía al 20%, en el cuarto y el primero de este año al 18% y en el segundo trimestre de 2006 al 13%", enumera.
Según explica, esto puede deberse a que "algunos sectores que lideran el crecimiento industrial según las estadísticas -especialmente vehículos automotores y minerales no metálicos- no cuentan con una importante presencia de pymes".
Pero la principal razón de esta "desaceleración" estaría señalando que las pymes tienen dificultades para seguir el ritmo productivo del conjunto del sector industrial manufacturero que en términos nominales crece un 18% y de la economía agregada, que lo hace al 22%.
El fenómeno no es privativo de un sector sino que se repite en la mayoría de los establecimientos, aunque el trabajo hace la salvedad que así como en capacidad instalada y empleo, las ventas tienen un crecimiento más difundido en las medianas que en las pequeñas empresas.
Al mismo tiempo, mientras desacelera la facturación, "se observa un renovado ajuste de los costos de producción y de precios de venta, que en transcurso de 2006 se incrementaron en términos interanuales en un 13,5%", apuntan.
Ambos fenómenos explican la evolución de las ventas de las pymes industriales deflactadas. De ese modo, "las cantidades vendidas en promedio durante el primer semestre de 2006 no difiere notoriamente de aquellas vendidas en el primer semestre de 2005", precisan.
Por otra parte, en el segundo trimestre de este año la proporción de pymes inversoras "verificó un leve descenso" en relación a mediados de 2004 y 2005. Se pasó del 43,4% (2004), al 40,9% (2005) hasta llegar al 39,6% este año.
Este freno en pleno proceso de crecimiento económico "constituye una señal de agotamiento de la capacidad propia de las empresas para financiar nuevos proyectos de inversión", revela el estudio. En este sentido también es diferente la situación de las pequeñas y las medianas empresas. Mientras las segundas concentran el 52,2% de la proporción de firmas que invierten, las primeras apenas llegan al 35,3%.
Así, "esta polaridad en la inversión presenta los primeros signos de una posible polaridad de desempeño productivo en términos de ventas y ocupados con la presencia de dos grupos de empresas: las que están en condiciones de captar las oportunidades del contexto y otras que están limitadas por el mismo", indica el informe.
Los rubros más activos en materia de inversión -donde predominaron las medianas- fueron el químico, caucho y plástico, aparatos eléctricos y autopartes, y productos de metal, maquinaria y equipos, mientras que los sectores más tradicionales quedaron debajo del promedio.
De cara al futuro, las expectativas de inversión para el tercer trimestre de 2006 superaron a las del mismo período de 2005, aunque se prevé que será bajo la misma estructura. Según el estudio, esta polaridad puede atribuirse a una caída de la rentabilidad que es mayor en las pequeñas que en las medianas empresas y por tanto les da a estas últimas mayor dinamismo inversor. A esto se suma que el acceso al financiamiento continúa siendo bajo con una amplia mayoría de empresas que no recurre a esta fórmula.
En este aspecto, el informe indica que durante el segundo trimestre de 2006 de dio la doble combinación de una mayor proporción de empresas que incrementaron su endeudamiento bancario así como una muy baja proporción de las que lo redujeron. Por eso, el nivel el es más elevado desde 2004, con un porcentaje que alcanza el 2,8% contra -2,3% de aquel período.
No obstante, aclara que "estas variaciones suceden sólo entre un 30% de pymes industriales que recurre al financiamiento bancario", lo cual confirma los problemas estructurales para financiarse.
Costo versus precio
Este escenario es en buena parte producto de una modificación en la estructura de costos de las compañías. Entre finales de 2005 y mediados de 2006 la tasa de crecimiento de los costos directos de la producción de pymes industriales creció 39% (segundo trimestre 2005/2006). Esto fue producto de la evolución de los salarios y de los precios internacionales de los insumos, especialmente petróleo y derivados, cobre, aluminio y mineral de hierro.
Al mismo tiempo crecieron los precios de ventas de las empresas en promedio un 14,8% entre el segundo trimestre 2005/2006, incluso superando el IPC que en el mismo período fue del 11,4%.
Sin embargo, "pese a los mayores incrementos de los precios ocurridos especialmente durante el segundo trimestre de 2006, el mayor aumento de los costos por sobre los precios de venta llevó a la continuación de la caída de la rentabilidad empresaria", explica Observatorio Pyme.
enviar nota por e-mail
|
|
Fotos
|
|
El aumento de los costos es el principal problema de las pymes.
|
|
|