Año CXXXVII Nº 49245
La Ciudad
Política
Economía
Opinión
La Región
Información Gral
El Mundo
Escenario
Policiales
Página Solidaria
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Salud


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 24/09
Mujer 24/09
Economía 24/09
Señales 24/09
Educación 23/09
Salud 20/09
Estilo 16/09
Página Solidaria 13/09
Palabras más 02/09
Autos 24/08

contacto

servicios
Institucional

 miércoles, 27 de septiembre de 2006  
Opinión
La violencia otra vez fue una moda

Sergio Faletto / La Capital

Ya está. El objetivo de la sociedad de los mediocres vivos fue cumplido. Una vez más la problemática de la violencia social expresada también en el fútbol fue lavada por el tiempo, porque aunque hayan pasado pocos días de los dislates cometidos por dirigentes, barrabravas y zonzos de ocasión, parece que transcurrió una eternidad. Es que el perverso sistema se encarga justamente de eso. Reciclar temas, ponerlos en vigencia en cuestión de horas y luego licuarlos para que nada cambie. Hasta que se produzca el próximo hecho que conmueva o venda mediáticamente. Y allí comienza otro capítulo de mil palabras, sanciones formales, pero ninguna acción que se proyecte en profundidad en pos de resolver la cuestión.

El paisaje compuesto por sesudos analistas en distintos programas periodísticos (dedicados a la política y economía) para hablar del fútbol que tenemos, sin siquiera haber concurrido a una cancha, es la portada de una cínica fábula. Porque así como cuesta imaginar a un Mariano Grondona en la cancha de Dock Sud, claro está que mucho más costará verlo.

Por eso es muy complicado creer en las soluciones que ensayan los sofistas de turno en dichas mesas, porque así como opinan de fútbol sin conocer, juzgan a la pobreza desde sus cálidos y confortables hogares instalados en las zonas más cotizadas de cada ciudad.

Lo cierto es que una vez más las expresiones de violencia en el fútbol ya fueron. Ellos ya establecieron "otro tema". Dieron vuelta la página, pero eso no alcanzó para ocultar la que ya fue escrita, similar a la que se escribe y escribirá. Porque con la página aplastaron de nuevo a las causas y consecuencias de esta asociación que vive pariendo violencia y matando al fútbol. Mientras debaten sobre las medidas a adoptar: quita de puntos, clausura de canchas, sanciones a dirigentes u otras determinaciones de cotillón. Eso sí, de investigar nada.

Entonces el escenario vuelve a la hipócrita preocupación. Donde no hay espacio para creerles a los teóricos del maquillaje social. Porque no existe un motivo para pensar que la historia cambiará cuando los protagonistas son los sospechosos de siempre. l
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo




  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados