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domingo,
17 de
septiembre de
2006 |
Duendes se aprovechó de las urgencias de GER
Aníbal Fucaraccio / La Capital
Duendes hizo fácil lo difícil. Mostró estirpe de gran candidato. Y eso que levantó el pie del acelerador. Con una soberbia tarea en el primer tiempo, los verdinegros barrieron ayer a Gimnasia por 40 a 15 en la penúltima fecha de la zona Campeonato del torneo Regional del Litoral y de esa manera dejaron a los auriazules con respirador artificial en el campeonato ya que para clasificarse a semifinales no sólo dependen de un triunfo propio sino del resultado que obtenga Universitario en la última jornada.
El equipo de Las Delicias se mostró suficiente y confiable. Estuvo intratable en la mitad inicial del cotejo y brindó espectáculo. Tuvo ideas y variantes en los movimientos de ataque y regaló un tackle muy sólido al momento de defender. De la mano de una pareja de medios que estuvo inspirada y con el generoso aporte colectivo del resto, el local construyó una victoria que se potencia por la envergadura del rival y porque ya se transita la antesala del período de definición del torneo. Nada menos.
Para Gimnasia fueron todas malas. Perdió sin atenuantes, no consiguió bonus y llega a la expiración de la zona Campeonato con enormes urgencias y la autoestima golpeada. Sólo la chance matemática alimenta su última ilusión y ese debe ser su motor durante la próxima semana.
De entrada quedó claro que el dueño de casa podía imponer su libreto con claridad. Gulino y Mangiamelli dirigían la orquesta con creatividad y sus músicos seguían las directivas con notable eficiencia. Duendes lastimaba por todos lados, con las formaciones fijas, las móviles, movía la pelota de un lado a otro de la cancha y manejaba la pelota a su antojo.
La visita no encontraba respuestas. Sus esbozos de reacción se desvanecían ya que no poseía la ovalada. Para colmo de males la defensa ofrecía algunas ventajas que fueron aprovechadas convenientemente por el aluvión verdinegro que se plasmó con los tries de Gattarello, Gulino, Farré (otra de las figuras de ayer) y Martínez. Duendes se fue al descanso 26-0 arriba y había olor a paliza en Las Delicias.
Sin embargo, el orgullo auriazul salió a flote y el conjunto de Covella logró asomar la cabeza pese a la anotación de Gorosito apenas comenzó el complemento. Liderado por el corazón inquebrantable de Lisandro Bosch, Gimnasia trató de equilibrar un juicio que ya tenía condena inapelable.
Duendes había perdido el ritmo vertiginoso que ofreció en los primeros cuarenta y eso le abrió la puerta de la contestación a su rival. Esa moderación del trámite le permitió a Gimnasia apoyar tres veces en el ingoal local y ponerse 15-14 en ventaja en el resultado parcial del segundo tiempo.
Aunque esa reacción sirvió de poco. Sólo para demostrar la más honrosa vergüenza deportiva tras el objetivo no cumplido. Duendes ya había edificado un triunfo con letras mayúsculas. Los primeros cuarenta minutos le bastaron para entusiasmar a propios y extraños. Y si puede exponer ese nivel en semifinales, es un serio candidato a obtener el cetro del Regional.
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Fotos
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Carrol, de Duendes, intenta escaparse.
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