El Papa lamenta personalmente el malentendido por sus declaraciones

Castel Gandolfo (Italia).- Tras las fuertes protestas en el mundo musulmán, el papa Benedicto XVI lamentó hoy personalmente el malentendido creado por sus declaraciones sobre el islam y la violencia y con ello la indignación desatada en el mundo islámico.

Pese a ello, en Somalia fue asesinada hoy a tiros una monja italiana, presumiblemente en relación con el controvertido discurso teológico que el Papa pronunció el martes en la universidad de Ratisbona.

Lo hizo durante el rezo del Angelus que dirigió desde su residencia vacacional de Castel Gandolfo. Tras una primera reacción del Vaticano, Joseph Ratzinger se distanció hoy de la cita que desató las protestas de los musulmanes.

“Se trató de una cita de un texto medieval que en ninguna forma refleja mi pensamiento personal”, dijo. Pero el Papa no extendió hoy sus explicaciones más allá de lo que ya había hecho ayer a través de un comunicado. Benedicto no retiró ninguna de sus palabras y tampoco pidió disculpas, como habían exigido numerosos clérigos en el mundo musulmán.

El martes pasado, durante un discurso pronunciado en la ciudad alemana de Ratisbona, Benedicto XVI citó un diálogo de la época medieval entre el emperador bizantino Manuel II Paleólogo con un erudito persa sobre el cristianismo y el islam.

“Muéstrame lo nuevo que ha traído Mahoma y ahí sólo encontrarás cosas malas e inhumanas, como haber ordenado difundir con la espada la fe que predica. A Dios no le gusta la sangre”, dijo en el siglo XIV el emperador que fue citado por el Pontífice.

El verdadero significado de sus declaraciones sobre el tema del islam pronunciadas en la universidad alemana de Ratisbona fue “una invitación al diálogo sincero y verdadero con un gran respeto mutuo”, aseguró hoy Benedicto XVI. Remitió también al comunicado que la víspera emitió el Vaticano: “Espero que pueda apaciguar los corazones y clarificar el verdadero significado de mi discurso”.

El líder de la Iglesia católica dijo sentirse “profundamente afligido” por la reacción que causó su discurso en Ratisbona y, paralelamente, volvió a instar al “diálogo sincero” entre el islam y el cristianismo.

El Ministerio del Interior italiano ordenó aumentar las medidas de seguridad, también en el Vaticano y en Castel Gandolfo, tras las amenazas provenientes de Irak y Somalia. En este último país, una monja italiana fue asesinada hoy a tiros en Mogadiscio.

En el ataque, que se produjo en un hospital, también murió un colaborador somalí de la monja, indicó la televisión italiana.

“Partimos de que lo sucedido está relacionado con las declaraciones del Papa”, dijo Yusuf Mohamed Siad, el encargado de la seguridad de la Unión de Tribunales Islámicos, que controla Mogadiscio. Fundamentalistas islámicos habían llamado anteriormente en Somalia a la “caza del Papa”.

Según las primeras informaciones, dos hombres armados entraron en la mañana de hoy en el hospital en el que la italiana, de 65 años, trabajaba como enfermera. Dispararon a la mujer por la espalda y la monja murió poco después. Dos sospechosos han sido capturados por las milicias que controlan Mogadiscio, sacudida por la guerra civil.

Entretanto, medios italianos destacaron que los servicios de inteligencia en Roma se toman muy en serio las recientes amenazas terroristas. Entre otros, el “Ejército de los Muyahedín” en Irak anunció en internet atentados. El grupo ya ha perpetrado ataques terroristas en Irak, se dijo en Roma. Ahora ha anunciado su intención de “destruir Roma”.

Mientras, y por primera vez desde la elección de Joseph Ratzinger como Papa, en abril de 2005, en el Vaticano se ha criticado a Benedicto XVI, según publica hoy el periódico La Stampa. El rotativo habla de “descontento en la curia” por las controvertidas declaraciones del pontífice sobre el islam y la violencia, realizadas el martes en Alemania. La Stampa cita a un miembro de la curia, quien dijo: “Con Karol Wojtyla (el papa Juan Pablo II), esto no hubiera pasado”.

Tras las palabras de hoy de Benedicto XVI, se produjo una primera reacción positiva a las mismas: los Hermanos Musulmanes de Egipto se mostraron satisfechos después de que el Papa asegurase no haber querido ofender a los musulmanes.

El líder de la organización, Mohammed Mahdi Akef, dijo hoy en el Cairo al ser preguntado: “Da igual si lo dijo con buena o mala intención, aceptamos sus disculpas porque no queremos provocar una crisis entre musulmanes y cristianos. El islam nos ha enseñado a tratar con otros de forma civilizada”.

Las declaraciones del Papa sobre el islam, la violencia y la cuestión de la razón no pondrán fin al diálogo entre musulmanes y los fieles de otras religiones, dijo.

En Teherán, entretanto, el Ministerio del Interior iraní convocó al nuncio del Vaticano. En diversos lugares del país se celebraron manifestaciones contra las palabras del Papa y, como protesta contra las controvertidas declaraciones, permanecieron hoy cerrados todos seminarios de clérigos islámicos.

El rey de Marruecos, Mohammed VI, ordenó llamar a consultas al embajador marroquí ante la Santa Sede y transmitió una nota de protesta al Papa, indicaron hoy fuentes de palacio, según las cuales, Mohammed VI alabó en su escrito las “virtudes” del islam.

El mufti de Arabia Saudí, Abdelaziz Al al Sheij, recomendó hoy por su parte al Papa “que se dedique más minuciosamente al islam”. Porque entonces Benedicto XVI se dará cuenta de que el islam no ha sido difundido con la espada, sino con “buenas palabras” y con argumentos convincentes de los antiguos musulmanes, aseguró.

Mientras tanto, el Vaticano y Turquía mantienen invariada la visita del líder de la iglesia católica al país para finales de noviembre. “Espero que el viaje tenga lugar”, manifestó hoy el secretario de Estado vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, en Roma. “Hasta ahora no hay razones para no llevarlo a cabo”. De forma similar se había manifestado hoy antes el ministro de Exteriores turco, Abdullah Gul, quien dijo que para su gobierno “no hay nada que hablar” respecto a “cualquier cambio” en el viaje programado. (DPA)