El boliche de Nucci

Oliverto Nucci, más conocido como Titi, tiene el único almacén y despacho de bebidas del lugar. Llegó a Los Nogales en 1948 y al poco tiempo instaló el negocio que aún mantiene y al que todos denominan "El boliche de Nucci".

"En décadas pasadas teníamos más movimiento porque venía gente de una colonia que ya no está". Rememora que los parroquianos llegaban a su boliche a caballo o en sulkys para tomar un trago, jugar a las cartas o a las bochas. "Eran otros tiempos", dice Nucci mientras acaricia a su inseparable perro Felipe, que muestra su habilidad de comer aceitunas sin tragarse el carozo.

"Acá te enterás de todos los chismes del poblado", dice Osvaldo Damene, quien con su esposa Irma Massa atiende el bar del Club Social y Deportivo de Los Nogales, que tiene un salón donde cada quince días se hacen cenas y bailes a beneficio. "Antes arrendaba campos, pero desde hace tres años tomé la conserjería del club y estoy conforme porque trabajo no falta y hasta viene gente de San José de la Esquina y Arequito", asegura Damene.

"Me ofrecieron -añadió- un empleo como cocinero en un restorán de Casilda, pero lo estoy evaluando porque me cuesta mucho dejar este pueblo tan tranquilo".

Nucci atiende su boliche desde hace 50 años.