La actividad desató una tormenta de críticas al Ministerio de Educación

Ahora el curso sobre valores y sexualidad se quedó sin aula

Primero se le retiró el aval y después el espacio en la Plaza Cívica

El curso sobre "Valores y educación sexual" que dicta la ONG "Con Mirada de Mujer" no sólo se quedó sin el aval del Ministerio de Educación de la provincia, sino ahora también sin el salón de la Plaza Cívica donde se dictaban las clases. La actividad -que comenzó hace dos semanas- había sido duramente cuestionada tanto en la Legislatura provincial como en la Justicia, a partir de diversas declaraciones de la titular de la organización, Nereida Brumat Decker, que criticaban la entrega de métodos anticonceptivos y equiparaban la homosexualidad con una enfermedad, entre otras cosas. Situación que generó una tormenta de quejas desde distintos sectores.

En medio de esta polémica, la ministra de Educación de la provincia, Adriana Cantero, revocó el viernes pasado la declaración de interés que había otorgado al curso. Y ayer, según indicaron desde la ONG, el coordinador de actividades culturales de la Plaza Cívica, Jorge Galfione, se comunicó telefónicamente con Brumat Decker para explicarle que no podrían seguir dictando las clases allí.

"Nos dijo que al no tener el curso el aval de Educación, no nos podían prestar más el salón", indicó la presidenta de la entidad; a la par que manifestó sentir "mucha pena" al ver que "los funcionarios públicos se dejen apretar por las críticas de los medios de comunicación" (ver aparte).


Otra versión
Otra fue la versión que dio el coordinador de la Plaza Cívica. "En realidad ella nos llamó a nosotros para decirnos que no iba a dictar más el curso. Fue de común acuerdo" sostuvo, aunque después aclaró que "se le prestó el espacio porque tenía el aval del ministerio" y, frente a la revocación de la resolución, no se podía continuar cediendo el lugar.

Más allá del entuerto, los participantes del curso (que pagaron 20 pesos de inscripción) podrán seguir tomando clases. La ONG aseguró la continuidad de la actividad, "en un lugar a confirmar" en los próximos días. Eso sí: no accederán a los certificados reconocidos por Educación ni sumarán puntos frente a la Junta de Calificaciones de la provincia.

La decisión de revocar el aval oficial del curso llegó después de que la socialista Lucrecia Aranda presentara en la Cámara de Diputados provincial un pedido de informes para conocer los antecedentes de la ONG organizadora del mismo, de los docentes que lo dictan y si sus contenidos garantizan la no discriminación por orientación sexual, sexo, género y edad.

Lo propio hizo el gremio docente (Amsafé) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) frente a la Fiscalía Nº5 de los Tribunales locales. Concretamente, la presentación pidió que se investigue "por qué el gobierno provincial avaló los cursos de un grupo de reconocida trayectoria discriminatoria, fascista y homofóbica que promueve la ignorancia en niños y jóvenes", según explicó el representante de ATE, Gustavo Martínez.

En sucesivas cartas de los lectores publicadas por La Capital, Brumat Decker había propuesto "dejar de administrar anticonceptivos en lugar de alimentos" (17/12/03), a la par que varias veces tildó a las minorías sexuales de "desviados" o "anormales".