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sábado,
12 de
agosto de
2006 |
Impacto. La cesantía generó preocupación en la comunidad funense, que reclamó por el galeno desde diversos sectores
La Justicia ordenó al Pami restituir
como médico al intendente de Funes
Lo despidieron por incompatibilidad de funciones. Una jueza revirtió la decisión hasta que termine el juicio
Funes.- La Justicia Federal resolvió que el doctor Juvenal Rímini deberá volver a ocupar el cargo como médico de cabecera del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (Pami). La obra social lo había despedido alegando incompatibilidad de funciones por ser también el intendente de la ciudad, amparándose en un decreto sancionado en 1961.
Sin embargo, la jueza Silvia Aramberri resolvió dar lugar a la medida cautelar innovativa peticionada por Rímini y dispuso la suspensión de la resolución dictada por la directora ejecutiva nacional del Pami, Graciela Ocaña, a quien le ordenó que restituya al médico en las condiciones vigentes anteriores a la resolución, hasta tanto se resuelva el juicio. La magistrada había emitido un fallo similar el 2 de agosto último a favor de un recurso de amparo presentado por los jubilados que se atienden con el profesional.
Luego de la decisión del Pami, Rímini se presentó ante la Justicia e interpuso una demanda con el objeto de que se declare la invalidez y nulidad de la resolución por la cual fue separado del cargo el 14 de junio y reclamó que se le conceda el derecho a proseguir con su relación laboral como médico de cabecera.
También solicitó que se declare inaplicable a su caso, el régimen de incompatibilidades para la administración pública nacional. Desde junio de 1978 hasta 1995, Rímini se desempeñó como prestador del Pami bajo locación de servicios y posteriormente, como médico en relación de dependencia y tuvo a su cargo una nómina de 700 pacientes de la obra social.
En la presentación judicial se asentó que Rímini es especialista en clínica médica y atención de la tercera edad y se aclaró que además agregó a esa actividad una carrera política en Funes que desempeñó como concejal entre 1994 y 2003 y posteriormente como intendente. En ese sentido, se mencionó que el desempeño dentro de la función pública "nunca le impidió continuar con la atención de sus pacientes".
La jueza mencionó lo resuelto por la Cámara de Apelaciones en un caso similar a favor de otro profesional de la salud donde hubo omisión del sumario previo con todas las garantías que hacen al debido proceso, como la declaración del imputado ofreciendo pruebas y donde se calificó a la cesantía como arbitraria.
A su vez, citó un decreto que regula el supuesto de incompatibilidad entre "el cobro de un haber provisional y la percepción de remuneraciones por el cargo correspondiente" y sostuvo que Rímini, al estar cumpliendo el cargo de intendente, "le provoca una afectación profesional y un grave perjuicio patrimonial y moral por cuanto deja de percibir sus haberes con motivo del cese de la relación laboral y culmina su carrera como médico de cabecera".
También, mencionó que el despido del médico "generó un gran impacto social en Funes que motivó la interposición de acciones de amparo por parte de 181 jubilados de esa localidad ante el mismo Juzgado".
Por su parte, Rímini se mostró conforme con la decisión judicial aunque dijo que esperará a que el organismo le notifiquen su continuidad. Ahora el Pami tendrá cinco días para apelar la decisión judicial, aunque el médico consideró que "de todos modos vuelvo a trabajar con o sin apelación porque el organismo no puede negarse a restituirme en el cargo". En ese sentido, manifestó que durante el tiempo que estuvo despedido siguió atendiendo a los abuelos gratuitamente pero no pudo emitir recetas de la obra social. "Para conseguirlas, mis pacientes tuvieron que viajar a Rosario o pedirlas al otro médico de cabecera local".
Por su parte, Daniel Reta, abogado de los jubilados, confirmó que la decisión judicial a su favor fue apelada por el Pami con expresión de agravio. "Ellos sostienen que los abuelos están cubiertos con los servicios que presta el otro médico de cabecera de Funes y los que no, pueden ir a atenderse a los nosocomios Pami I y II de Rosario. El lunes vamos a contestar rechazando los agravios y denunciando el incumplimiento de la decisión judicial", remarcó.
Maniobra política
Conocida la destitución de Rímini, los funenses sospecharon que la medida fue producto de "una mano negra de la política" y apuntaron a "un sector del Partido Justicialista". Inmediatamente, afiliados al justicialismo emitieron un comunicado manifestando su solidaridad hacia el médico y aclarando que el partido "no tuvo nada que ver con este hecho que empaña a toda la ciudad" aunque aclararon que no incluían dentro de la agrupación "al Frente para la Victoria en sus dos vertientes menemistas que hay en la ciudad".
Las sospechas se incrementaron al conocer que en la provincia hay casos similares de mandatarios que son a su vez médicos del Pami y no recibieron notificaciones similares.
Otra muestra de rechazo a la decisión del Pami fue la de un dirigente del ARI que manifestó su indignación por los jubilados que "no pueden elegir a su médico de confianza porque no es oficialista".
El Concejo solicitó una entrevista al delegado rosarino del Pami, Juan Carlos Achilli y aclararon que el cuerpo "desconoce los motivos de tan delicada decisión donde se ponen en juego valores humanos, profesionales y posiblemente políticos".
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El intendente Juvenal Rímini volverá como médico de cabecera de Pami.
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