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 miércoles, 02 de agosto de 2006  
Ruidos en la línea. El oficialismo salió a desmentir al ex ministro y le pidió que tenga "más seriedad"
El kirchnerismo replicó la denuncia de espionaje lanzada por Lavagna
Cuestionan al otrora titular de Economía por cargar contra el gobierno. Macri también habló de pinchaduras telefónicas

La embestida del ex ministro de Economía Roberto Lavagna contra el gobierno y su denuncia de que era objeto de presuntas "pinchaduras" de teléfono mereció ayer la réplica del oficialismo, que salió a cuestionar al otrora jefe del Palacio de Hacienda.

El presidente del bloque oficialista de Diputados, Agustín Rossi, aseguró lamentar "mucho" las declaraciones de Lavagna y desafió al ex funcionario. "Debe tener material" para realizar una denuncia de esa naturaleza, enfatizó.

En ese sentido se pronunció el secretario de Hábitat de la Nación y jefe de la Federación Tierra y Vivienda (FTV), el piquetero Luis D'Elía, quien lamentó que Lavagna haya elegido "el camino de la autovictimización". Además, le recomendó que se "limite a debatir en política".

En cambio, el líder de Compromiso Para el Cambio, Mauricio Macri, se sumó a la denuncia de Lavagna y dijo ser víctima de situaciones similares: "Lo hacen sistemáticamente con todos. Yo también los tengo pinchados (a los teléfonos), no todo el tiempo, porque no dan abasto para controlar a todo el mundo".

Macri aclaró que, hasta ahora, no recurrió a la Justicia "porque, desde el momento en que uno hace la denuncia, ellos conectan los aparatitos (sic) que han comprado".

El lunes pasado, Lavagna, quien viene subiendo el tono de sus críticas al gobierno, denunció que sus teléfonos están intervenidos y que es "espiado" durante sus tareas cotidianas.

"A lo mejor, poseer pocos votos tiene algo de bueno: los espías dejarán de seguirme y de pincharme los teléfonos. Pero que escuchen todo lo que quieran, no hay nada que ocultar", afirmó con ironía durante el tradicional almuerzo televisivo de Mirtha Legrand.

Sin embargo, el ex jefe del Palacio de Hacienda no quiso precisar si el autor de las presuntas escuchas es el gobierno ni qué sector vinculado a la Casa Rosada sería el que lo espía.

"Cómo va a decir que el gobierno le pincha los teléfonos: no puede hacerlo en un programa de color, como el de Legrand, que es pasatista", respondió Rossi a las aseveraciones de Lavagna, quien a fines de 2005 debió dejar la cartera de Economía por pedido del presidente Néstor Kirchner. Fue el final de una relación tirante por defender distintos enfoques de la gestión económica.

Respecto de la polémica, el diputado lamentó "mucho" las declaraciones de Lavagna, quien "hasta hace un año era ministro nuestro". Estimó, además, que el ex funcionario "ahora se pasea por el mundo diciendo que la Argentina es mal vista, lo cual no es la percepción que tuvimos cuando viajamos a España".


El camino del ridículo
Por su parte, D'Elía señaló que, "cuando se acaban los argumentos políticos y se empieza a gatopardear (sic) el mensaje, el único camino que queda es el de la ridiculización".

Tanto Kirchner como los ministros Aníbal Fernández y Felisa Miceli evitaron responderle a Lavagna. "Yo no lo escuché", se excusó el titular de Interior, al tiempo que la jefa de Economía advertía: "Sobre esas cosas no hablo".

Sin embargo, el que sí salió a retrucar al ex titular del Palacio de Hacienda y posible candidato presidencial fue el gobernador de Buenos Aires, Felipe Solá.

"Me parece pésimo decir que la Argentina está siendo mal vista. ¿Por quién? ¿Por Honda, una empresa importantísima que se viene a radicar en el país? El (por Lavagna) la ve mal. Nosotros bastante bien, dentro de todo", subrayó el gobernador.

Luego hizo una encendida defensa del modelo económico. "No hay más seguridad jurídica que un país que crece en sus exportaciones, importaciones y en el mercado interno", sentenció Solá.

Paralelamente, y más allá de las palabras de su líder, el macrismo no tiene planes de marcar el número telefónico de Lavagna. En todo caso, será el ex ministro el que deberá hacer la primera movida de acercamiento.

"No está previsto empezar a dialogar", aseguró el titular del bloque macrista de Diputados, Federico Pinedo, acerca de si se abre una instancia de negociación con Lavagna, tras lo declarado por el propio ex jefe de Economía.

Si bien no confirmó su candidatura presidencial, Lavagna mostró abiertamente su interés en esa apuesta y no descartó extenderla a Macri y López Murphy. "Son ellos los que, llegado el caso, tendrán que decidir si efectivamente pueden compartir o no un programa", dijo el ex ministro.

"Cualquier persona que quiera oponerse al oficialismo pensará que tiene que conversar con nosotros, pero no dialogamos por los medios", reflexionó Pinedo.

Asimismo, el legislador destacó que el PRO está abierto al diálogo "con cualquiera" que se acerque a ese espacio.
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Lavagna fue criticado por elegir los almuerzos de Mirtha para hacer denuncias.

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