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sábado,
20 de
mayo de
2006 |
Zidane espera despedirse con la copa en la mano
El francés Zinedine Zidane le pone punto final a su carrera y quiere ganar otro Mundial
Zinedine Zidane lo tiene todo resuelto: espera levantar la copa del Mundial en Berlín el 9 de julio y retirarse de la mejor manera del fútbol. “No puedo estar conforme con lo que alcancé en los pasados dos años. Deseo ganar otro Mundial, y para ello daré todo lo que tengo. Estoy muy motivado para alcanzar esa meta”, señaló el crack francés.
Sus dos goles de cabeza ayudaron para que Francia derrotara a Brasil por 3 a 0 en la final de 1998 y así alcanzara su único campeonato ecuménico, lo que le aseguró a Zizou un lugar en la historia del deporte francés.
Los aficionados franceses, que lo idolatran, le pidieron que regrese a la selección. Zidane se había retirado del representativo galo después de la decepcionante eliminación de Francia ante Grecia en los cuartos de final de la Eurocopa 2004. Zizou los complació en agosto pasado, en momentos en que Francia tenía dificultades para clasificarse a Alemania 2006.
Su impacto en los últimos cuatro partidos de la eliminatoria se evidenció en una charla entusiasta en el entretiempo del partido ante Irlanda. Con el marcador 0 a 0 cambió su habitual temperamento y les recordó, con palabras fuertes, a sus compañeros lo que estaba en juego.
Thierry Henry respondió con un sensacional disparo en comba que le dio a Francia el triunfo por 1 a 0. “Sólo ver a Zizou en la cancha te inspira”, comentó.
El entrenador Raymond Domenech esperó dos meses después de la despedida de Zidane antes de llamarlo por teléfono para preguntarle por su reaparición. El técnico cree que Zidane puede comandar a los franceses otra vez.
“Estoy convencido de que puede escribir la mejor página de su historia: ganar una nueva Copa del Mundo”, indicó Domenech.
Se pensaba que Zidane podía darse esa satisfacción en el Mundial de Corea-Japón 2002, pero ocurrió todo lo contrario y Francia se fue en la primera ronda.
El volante se lesionó en un amistoso ante Corea del Sur, previo al Mundial, agotado luego de una extenuante y magnífica temporada con Real Madrid, la que selló con un maravilloso gol de volea en la final de la Liga de Campeones.
Zidane se preguntaba si podría jugar el Mundial, pero el entrenador Roger Lemerre lo escogió para formar parte de la maquinaria francesa.
Sin Zidane, Francia perdió 1 a 0 con Senegal y empató 0 a 0 con Uruguay. Y se despidió humillada con una derrota por 2 a 0 ante Dinamarca, un partido en que el astro francés estuvo finalmente en la cancha pero lució fuera de forma y no tuvo el impacto esperado.
Así Francia se convirtió en el primer campeón defensor eliminado en la primera ronda desde 1966, cuando ese infortunio le tocó a Brasil.
“Haré cualquier cosa por evitar una lesión esta vez”, declaró Zidane. Y parece que cumplirá. Lo de ganar la Copa ya es otra historia.
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