El municipio deberá pagar $185 mil por mala praxis médica

Un mal diagnóstico en el Hospital Carrasco le costó la vida a un paciente en 1999. Cobrará su familia

La Municipalidad de Rosario deberá indemnizar a la familia de un hombre de 50 años que murió por un aneurisma disecante de aorta a los siete días de recibir atención médica deficiente en el Hospital Carrasco, cuando asistió a la guardia por fuertes dolores de pecho y espalda, pero fue derivado a su domicilio sin los exámenes de rigor para la sintomatología que presentaba. El Tribunal Colegiado de Responsabilidad Extracontractual Nº2 encontró culpable por mala praxis médica a la profesional que lo atendió en ese momento, y ordenó al Ejecutivo local resarcir a la viuda e hijos de la víctima con 185 mil pesos.

El hecho se remonta al 5 de octubre de 1999, cuando Miguel Angel Orieta se presentó cerca de las 20.30 al servicio de guardia del efector municipal con fuertes dolores pecho y espalda.

Ya en el Hospital Carrasco recibió atención clínica de la profesional identificada como Ana F., quien diagnosticó "dorsalgia", y especificó en la historia clínica que el paciente no tenía alergia a medicamentos. También hizo constar que el motivo de la consulta era "dolor dorsal que aumenta con los movimientos". Realizó auscultación respiratoria y cardíaca, medicó a Orieta con miorrelajantes y analgésicos y lo derivó a su domicilio, recomendándole volver a un control por consultorio externo.

El hombre regresó a su casa, siguió con sus actividades normales y tomó la medicación prescripta. Según sus familiares, no registró ninguna mejoría, y los dolores de pecho y espalda persistían. Pero la mañana del 12 de octubre se sintió realmente mal y sus hijos lo trasladaron de urgencia nuevamente al Carrasco. A los 45 minutos de ingresar con un paro cardiorespiratorio, los médicos comunicaron su fallecimiento a causa de un aneurisma disecante de aorta.

Considerando los antecedentes, la familia de Orieta entabló una demanda por daños y perjuicios contra la Municipalidad como titular del Hospital Carrasco y responsable de su administración general.

Basándose principalmente en las pericias de los médicos forenses, el Tribunal Extracontractual Nº2 concluyó que la profesional que atendió en primera instancia a Orieta incurrió en faltas graves. Porque de acuerdo a la sintomatología original del paciente, debió recomendar su internación, ordenar radiografías de tórax, electrocardiogramas y estudios clínicos complementarios. Se destaca que en el registro del hospital no constan "diagnóstico presuntivo de la causa del dolor como tampoco diagnósticos diferenciales", como para sospechar de una aneurisma aórtico, causa final de la muerte.

Por eso, el Tribunal concluyó, de acuerdo a la pericias técnicas, que hubo "sin ninguna duda una mala praxis médica". Es más, dice que la conducta de la médico de guardia fue omisiva, permitiendo la progresión de la enfermedad esta su desenlace fatal".

La Municipalidad ahora deberá hacer efectiva en el término de 20 días la suma que la Justicia impuso por daños y perjuicios contra la familia damnificada.

La guardia del Carrasco fue donde atendieron a Orieta.