Un país rico en petróleo con una población muy pobre

Las explosiones de ductos por hechos de sabotaje ocurren una y otra vez en Nigeria. Reflejan cuán desesperada es la situación de las personas que habitan un país rico en petróleo, pero que viven en la extrema pobreza.

Debido a su bajo nivel de azufre, el crudo nigeriano cuenta con una gran demanda. Cerca del 90 por ciento de los ingresos por divisas del país proceden de la producción petrolera en el sur. Pero los habitantes de la región costera no ven nada de esta riqueza. Sobre todo el delta del Níger, donde más se sufre la contaminante industria petrolera.

Los pueblos carecen de calles y de agua limpia. La única luz que ven por la noche es la de las llamas en las torres en las que se queman los gases.

Por eso, alguno que otro se arriesga a perforar los ductos y llenar bidones con el líquido altamente inflamable.

Hace diez años, el escritor nigeriano Ken Saro-Wiwa llamó la atención sobre la penosa situación en su país. Fue condenado a muerte por su compromiso. Hoy en día no son escritores sino combatientes rebeldes los que reclaman para su región un reparto justo de la riqueza del país.

En los pasados meses fueron secuestrados varios empleados extranjeros de compañías petroleras. El jueves último, un empleado estadounidense de una empresa petrolera murió de un disparo realizado desde una moto en marcha.


Promesas del gobierno
El presidente nigeriano, Olusegun Obasanjo, que probablemente se presentará el año que viene para un tercer mandato, anunció recientemente la construcción de una autovía y nuevos puestos de trabajo para la región. Sin embargo, los insurgentes no se dejaron impresionar.

"Desde hace décadas, el gobierno nigeriano ha saqueado la riqueza de nuestra región", opina el portavoz del grupo combatiente Movimiento para la Emancipación del Delta del Níger. "Esta injusticia no puede borrarse ofreciéndonos simplemente unos cuantos puestos de trabajo como peones. No exigimos otra cosa que el traspaso del control sobre la riqueza a los verdaderos propietarios, es decir, a los habitantes del delta del Níger".