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jueves,
04 de
mayo de
2006 |
Detenido no declaró porque víctima de abuso le arrancó la lengua
Santiago del Estero.- Un joven, que sufrió la mutilación de parte de su lengua en un supuesto intento de abuso sexual, no pudo emitir palabra alguna ante el juez que intentó indagarlo por la denuncia que presentó la presunta víctima, según se supo hoy en los tribunales de la provincia.
El insólito episodio se produjo ayer en el juzgado en lo Criminal y Correccional de Segunda Nominación cuando el acusado, de 18 años y cuya identidad se mantiene en reserva, fue trasladado desde la alcaidía de Tribunales para declarar sobre el hecho ocurrido la noche del 23 de abril pasado en un paseo público del barrio Autonomía, sector oeste de la capital santiagueña.
Fuentes judiciales comentaron que ante la imposibilidad de pronunciar palabras, el abogado defensor del joven, Rubén Seiler, actuó como interlocutor entre su cliente y los funcionarios de la Justicia.
Incluso, el secretario del juzgado le facilitó un papel y un bolígrafo para que consignara allí sus datos personales y los de sus familiares directos, lo que siempre se coloca en el inicio de una declaración indagatoria o testimonial, añadieron las fuentes.
Ante el frustrado trámite, el acusado fue traslado más tarde al Penal de Varones por disposición del juez Abelardo Basbús, quien hoy dispuso que se le efectuaran pericias psicológicas.
Según la denuncia, aproximadamente a las 22:15 del lunes 23, una estudiante universitaria de 22 años bajó de un colectivo y se dirigía hacia su casa cuando fue abordada por un desconocido, que la tomó de la cintura y comenzó a manosearla en sus partes íntimas.
La víctima intentó gritar para pedir ayuda, por lo que el agresor le dio un beso e introdujo su lengua en la boca de la chica, quien lo mordió con tal fuerza que le cortó el extremo de la misma.
El muchacho la soltó presa del dolor y de una hemorragia bucal, por lo que la damnificada pudo escapar, llegó a su casa y le contó lo ocurrido a sus familiares, por lo que su padre la acompañó a la comisaría décima para denunciar el abuso sexual.
Dos horas después del incidente, un paciente ingresó en la guardia del hospital Regional por haber perdido parte de su lengua, por lo que la policía lo apresó allí mismo.
Paralelamente, se investiga si el mismo joven es responsable de al menos otros dos ataques sexuales contra mujeres en Autonomía, el mismo barrio en el que él reside. (DyN)
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