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domingo,
30 de
abril de
2006 |
Malos hábitos. El 16 por ciento de los pibes sondeados sufre de sobrepeso y
La mitad de los chicos de clase media ingiere calorías en exceso
La encuesta fue realizada entre niños de 9 a 13 años
de Rosario, Capital Federal y el Gran Buenos Aires
El 53 por ciento de los chicos rosarinos y porteños de clase media consume más calorías de las necesarias y, de ellos, el 16 por ciento sufre de sobrepeso y hasta de obesidad. Esto se debe a que prácticamente todos los encuestados (el 99 por ciento) reconocieron la ingesta cotidiana de productos con alto valor proteico como bebidas azucaradas (jugos y gaseosas), alfajores, galletitas dulces y snacks. Así lo demostró un trabajo de investigación realizado por el Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil (Cesni) en escuelas de nivel socioeconómico medio de Rosario y Buenos Aires que fue presentado el jueves en las Jornadas de Prevención para la Comunidad organizadas en el marco del XXV Congreso Argentino de Cardiología.
La pesquisa analizó durante el año pasado los hábitos alimentarios y los patrones de actividad física, así como el peso y la estatura, de 553 niños de entre 9 y 13 años de dos escuelas de Rosario -la Cristóforo Colombo (ya desaparecida) y el Centro Educativo Latinoamericano- y de otras de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires. Su valor de muestra se destaca si se tiene en cuenta también que es una de las pocas encuestas realizadas en el nivel socioeconómico medio, ya que la mayoría de los datos sobre el tema se refieren a niños en situación de pobreza.
Además de verificar la mala alimentación de los chicos, la investigación determinó que el 16 por ciento tiene exceso de peso, con un 12 por ciento de sobrepeso y un cuatro por ciento de casos de obesidad. Por otra parte, se observó que un 16 por ciento ingiere menos calcio del necesario. También se demostró que muy pocos niños consumen leche y que el 40 por ciento de estos va a la escuela sin haber desayunado.
Paralelamente se comprobó un aumento en la cantidad de horas que los niños pasan frente al televisor y la computadora, en detrimento de la actividad física. Esta combinación avisora una adolescencia y una adultez con grandes probabilidades de sufrir hipertensión arterial, colesterol, diabetes, y como consecuencia, posibles enfermedades cardiovasculares.
Paula Pueyrredón, investigadora asociada del Cesni, aclaró que "estos son los primeros resultados, porque aún hay que profundizar en muchos datos".
Según Pueyrredón, en base a las relaciones estadísticas efectuadas, los chicos que comen en familia (54 por ciento) y los que desayunan todos los días (64 por ciento) se alimentan en forma más saludable, es decir que ingieren menos frituras, calorías y comidas rápidas, sobre todo hamburguesas. "Quedaría demostrado que los niños que cuentan con un contexto familiar de contención tienen mejores hábitos alimentarios", expresó.
Por su parte, Fabiana Rubín, médica nutricionista, que estuvo a cargo de la presentación del trabajo del Cesni en Rosario, comentó que "la mayor ingesta de golosinas, gaseosas y facturas, en reemplazo de los alimentos más nutritivos, implica un mayor consumo de energía. Es decir que empeora la calidad nutricional", remarcó.
Además, el especialista Daniel Mailand señaló que es "alarmante que los chicos pasen cuatro horas promedio por día mirando televisión o jugando en la computadora. Esto demuestra que el sedentarismo está invadiendo cada vez más la salud de los niños".
En respuesta a esta situación, se lanzó por primera vez en Rosario el Programa de Educación Alimentaria para las escuelas de todo el país ante más de 1.200 chicos. En la presentación del programa en Buenos Aires se proyectó un video de pocos minutos donde se pudo ver a sus protagonistas: dibujos animados, cuyos héroes son Nutrigirl y Actiboy, junto al villano Snackman. De este modo, se intenta enseñar a los alumnos los beneficios de la nutrición sana y la actividad física.
Los organizadores dijeron que esta es una forma alternativa de captar la atención de los niños para aprender conceptos fundamentales sobre alimentación saludable.
En esa oportunidad se invitó a otras instituciones a acercarse al programa educativo a través de los sitios www.cesni.org.ar y www.paty.com.ar.
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