Automovilismo: sin paralelos en la Fórmula Uno

Una eventual categoría alternativa parece descartada, pero la batalla continúa

Una eventual Fórmula 1 paralela parece descartada, pero los fabricantes "rebeldes" no se ven como perdedores de la batalla por el futuro de la categoría reina del automovilismo tras haberse inscripto en el campeonato de 2008.

"No lo veo como que nosotros hayamos cedido, no nos hemos puesto de rodillas", dijo ayer el jefe deportivo de Mercedes, Norbert Haug.

Los cinco fabricantes "rebeldes", agrupados en la GMPA (Grand Prix Manufacturers Association), se inscribieron en el campeonato de 2008 antes del Gran Premio de Australia del domingo tras un ultimátum del presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), Max Mosley.

Haug se niega a que esto sea una declaración definitiva sin que se entienda que se debe proseguir con el trabajo conjunto. "Con la inscripción no se concede nada", aseguró Haug. "Como última consecuencia todavía está presente crear una serie propia, aunque creo que esa posibilidad es pequeña", agregó.

Pero el sueño de esa serie paralela a la Fórmula 1 quedará sólo sobre el papel, según una notificación conjunta de Toyota y de la FIA. La marca japonesa, que junto a BMW, DaimlerChrysler, Honda y Renault conforma la GPMA, pero hace pocos días anunció junto a la FIA que el Gran Premio de Japón del próximo año se celebrará en la renovada pista de Toyota en Fuji en lugar de la que tradicionalmente se utiliza en Suzuka desde que la máxima categoría del automovilismo mundial volvió a la tierra del sol naciente.

Parece poco probable que ahora Toyota dé un giro en su relación con la FIA a favor de una postura de fuerza de la GPMA.

Sin embargo, habrá nuevas discusiones. "Ahora debemos reunirnos y modificar el reglamento para que se amolde a los deseos de la mayoría de los equipos", exigió Haug. Como elemento de discusión está el proyecto de reglamento que ya ha hecho público la FIA, que prevé la "congelación" del desarrollo de los motores. "Necesita retoques", añadió el director deportivo de Mercedes, socio de McLaren.

Haug considera como un gran éxito de los fabricantes la nueva cláusula de mayoría en los estatutos de la FIA.

Ya la pasada semana se reunieron en Maranello los ingenieros de Cosworth, que nutre a Williams, como chasis más importante, con los responsables de la FIA para hablar de los motores. En ese encuentro se acordó el enfriamiento del desarrollo de los motores desde 2008 y hasta 2012.

Ese tiempo se corresponde al período en el que aún será válido el nuevo acuerdo Concorde, la "Constitución de la Fórmula 1", que contempla los flujos monetarios. Hasta ahora seis escuderías firmaron ya el acuerdo con Bernie Ecclestone. El primero fue Ferrari hace más de un año con un cebo supuestamente de 100 millones de euros (120 millones de dólares).

Los "rebeldes" también creen que están en el buen camino en la negociación con Ecclestone, patrón de la Fórmula 1.

"Los fabricantes se ocupan de la competición y de la lucha por estar arriba. Queremos una parte del pastel", señaló Haug, que resumió las exigencias de la GPMA: "Queremos un claro aumento de los ingresos, un reglamento liberal y un descenso notable de los costos". (DPA)

McLaren-Mercedes (Kimi Raikkonen) es una de las escuderías rebeldes que por ahora decidió meterse de lleno en el negocio de Ecclestone.