Un cara a cara que aún no tuvo eco

Ante la determinación de relevar al padre Joaquín Núñez de su cargo en la capellanía del Hospital Carrasco, los que trabajan junto con él en los centros comunitarios se movilizaron el pasado 8 de febrero hasta la sede del Arzobispado local (Córdoba y España), y motivaron un encuentro cara a cara entre el arzobispo Eduardo Mirás y el cura militante.

Hostigado por los manifestantes, el jefe apostólico dio su visión del caso, pero respondió que no puede interferir en las órdenes que emanan del ministerio provincial de los franciscanos (de quien depende Joaquín) y se ajustó al "derecho canónico" que impide ejercer una función pública a los sacerdotes, en relación con el cargo que ocupa Núñez al frente de la Dirección Provincial de Asuntos Indígenas. No obstante, Mirás dejó la promesa de "volver a charlar" con el ministerio franciscano para intentar destrabar la situación.