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domingo,
18 de
diciembre de
2005 |
Entrevista. Carlos Kunkel se diferenció de Mazzón
"Duhalde está resentido y busca
hacer una alianza con Macri"
El diputado bonaerense dijo que el ex presidente no se retiró de la política sino que está agazapado
Jorge Sansó de la Madrid / La Capital
"Eduardo Duhalde está resentido y busca afianzar una alianza neoliberal con Mauricio Macri para retrotraer el país al pasado. Ese es el peligro actual", golpeo ayer desde Santa Fe Carlos Kunkel, quien a la vez se diferenció de Juan Carlos Mazzón, el otro kirchnerista que camina la provincia y hace 36 horas lanzó la candidatura a gobernador de Agustín Rossi desde una agrupación que se declara ajena a los liderazgos de Jorge Obeid y Carlos Reutemann.
El ex subsecretario de la Presidencia de la Nación y flamante diputado nacional por la provincia de Buenos Aires presidió en la capital santafesina Fe un plenario de dirigentes peronistas enrolados en el Frente para la Victoria que se referencian en el liderazgo del presidente Néstor Kirchner.
Después de arengar a unos 250 militantes convocados en un hotel por el subsecretario de Municipios y Comunas de la Nación, Claudio Leoni, y el líder de ATE Santa Fe, Jorge Hoffmann, Kunkel le dijo a La Capital que "jamás propició un proyecto de transversalidad" y que ese fue "un cartel que le colgó el duhaldismo".
-¿Se atribuye a usted haber sido el primero en lanzar al ruedo la candidatura de Cristina Fernández y haber impulsado la madre de todas las batallas en la provincia de Buenos Aires?
-Son formas exageradas de presentar las cosas. Lo importante es que la realidad evoluciona por la construcción y el liderazgo político del presidente. Pero es cierto que hubo dirigentes que opinaron que se podía acordar con el pasado, con Duhalde, y yo estuve entre quienes se opusieron.
-Si salía mal, hoy usted no estaba aquí.
-Entendimos la desesperada necesidad de la gente de salir adelante, de buscar un país más serio y más justo, sin bandidos. Tres millones de bonaerenses coincidieron en que la opción era acompañar al presidente.
-¿Terminó la vida política de Duhalde?
-Está mostrando un alto grado de resentimiento y esta agazapado viendo en qué momento terminará fortaleciendo su objetivo de alianza con Mauricio Macri.
-¿Qué significa esa alianza?
-El modelo neoliberal que tanto daño hizo al país. Ese es el peligro actual. El (Duhalde) hubiera sido un buen presidente en 1999, porque tenía voluntad de cambio, pero con la derrota volvió a las prácticas que había adquirido en sus épocas de socio de Menem.
-A Menem se lo acusó de ser fiel al FMI, pero el que le paga es Kirchner.
-Menem nunca le pagó a nadie, hipotecó el país y regaló las empresas públicas. En 1944, cuando se creó el FMI, Perón -que estaba en el gobierno aunque todavía no era presidente- se opuso a entrar al Fondo y dijo que antes de firmar un préstamo se cortaba la mano.
-¿Cómo se entiende entonces que ustedes paguen anticipadamente?
-Todos los que han seguido las recetas del Fondo están en contra de esa tradición peronista. No estoy diciendo que hay que romper con el FMI. El mundo ha cambiado, estoy diciendo que el país entró al Fondo de la mano de una dictadura como la de Aramburu y algunos siguieron esa tradición. Ahora estamos recuperando nuestra capacidad de determinación en materia económica.
-¿Haciendo lo que dice el FMI?
-No debiéndole nada al FMI y desligándonos de su influencia nefasta.
-No son pocos quienes siembran dudas sobre que eso resulte realmente así.
-Los burócratas y gurúes del neoliberalismo omiten mencionar que al 31 de diciembre del 2004 las reservas del país alcanzaban los 20 mil millones y que por el sacrificio del pueblo y la austeridad del gobierno, Argentina pagó más a los organismos, refinanció la deuda con una importante quita y logró recuperar una bolsa de más de 7 mil millones de dólares.
-¿Para pagar al FMI?
-Mire, para respaldar la base monetaria, el circulante de dinero que hay, se necesitan 15 mil millones de dólares. Con la reserva de 27 mil millones, pagándole al FMI, nos quedan 16 millones de reservas.
-También queda desocupación y pobreza como deuda interna.
-Lo que queda es un país que creció el 9 por ciento. Es decir, haciendo lo contrario a lo que dicen los neoliberales, se puede avanzar en la economía.
-Pero otra distribución de la riqueza, ¿no es materia pendiente?
-Se han creado 2 millones puestos de empleo. Si logramos mantener este ritmo de crecimiento al cabo del mandato, el país habrá crecido el 50 por ciento. Mientras tanto se ha privilegiado la inversión en salud, educación, productividad y creación de empleo, que es la única forma auténtica de redistribuir la riqueza para combatir la pobreza.
-¿Qué busca en Santa Fe?
-He venido a una reunión con dirigentes que han estado acompañando este proceso buscando el camino de la esperanza y generando canales de participación ciudadana para que sea una democracia plena.
-¿Qué tiene que ver eso con la propuesta de Mazzón de hacer un kirchnerismo santafesino al margen de los liderazgos de Reutemann y Obeid?
-No sé qué hace Mazzón. Yo soy dirigente de la provincia de Buenos Aires. Respecto del gobierno de Obeid, está acompañando este proceso, como lo está haciendo Reutemann. Nosotros respetamos la autonomía e institucionalidad de cada distrito. Además, el presidente no necesita voceros. El que se pelea con los grandotes a nivel internacional, ¿cree que necesita voceros? Pues, no.
-¿La transversalidad quedó enterrada en el pasado?
-Nunca participé de esa idea. Milito en el peronismo. Soy congresal provincial y nacional y me parece bien que haya todas las aperturas necesarias, pero desde mi partido. Me colgaron el cartel de que yo armaba la transversalidad desde el duhaldismo y otros sectores, pero nunca fue así.
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Carlos Kunkel.
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