El crimen de Cristian Espinosa

Piden 15 años de cárcel para un camionero que mató a presunto ladrón

Lo hizo la fiscal Cristina Rubiolo. El hecho ocurrió en abril de 2002 y el acusado es Sergio Ricardo Boja

La fiscal que interviene en la causa contra un camionero que en abril de 2002 mató de un disparo a un joven, al presumir que estaba robando en su vehículo, solicitó una pena de 15 años de prisión para el imputado. Esa es la condena que pidió la fiscal Cristina Rubiolo al presentar sus conclusiones dentro del proceso penal que se le sigue a Sergio Ricardo Boja, quien se encuentra en libertad mientras se tramita el juicio. La encargada de la acusación consideró que el camionero cometió un homicidio agravado por el uso de arma de fuego y planteó que "tuvo otras opciones" antes que disparar cuando su vida no era amenazada.

El pedido de la fiscalía ingresó al expediente cuando la causa se acerca a su etapa final. El caso está a cargo del juez de Sentencia Nº 4, Julio Kesuani, quien luego de escuchar a las partes deberá dar su veredicto. Boja está imputado por el crimen de Cristian Espinosa, quien tenía 20 años al recibir un escopetazo en la ingle por el cual cayó gravemente herido y que poco después le provocó la muerte, mientras estaba internado en el Heca.

El hecho ocurrió la noche del 11 de abril de 2002. Sergio Ricardo Boja había estacionado su camión cargado con mercaderías frente a su casa de Vera Mujica al 3400. En un momento escuchó ruidos en el vehículo y se asomó a la ventana con una escopeta en sus manos al temer que alguien estuviera robando. El camionero vio a dos muchachos subidos al camión y disparó desde la ventana, aunque él sostiene que el tiro fue accidental.

Luego de un enrevesado trámite, el caso quedó caratulado como homicidio simple. Boja terminó procesado por esa figura penal, aunque le permitieron aguardar el fallo definitivo en libertad. Al presentar sus conclusiones en la causa, la fiscal pidió que se condene a Boja como autor de un homicidio simple con dolo eventual. Y descartó que el tiro haya sido accidental.

Esto significa que Boja, a su criterio, no tuvo el deliberado propósito de matar, pero incurrió en una conducta que podía ser letal y no le importaron las consecuencias. Para Rubiolo no se trató de un crimen preparado: interpretó que el dueño del camión se sintió vulnerado y reaccionó ante una situación inesperada. No obstante, la fiscal planteó que al disparar una escopeta apuntando al cuerpo de una persona debió prever la posibilidad de provocarle lesiones muy graves o la muerte. También destacó en su escrito que el acusado "tuvo otras opciones antes que disparar", como llamar a la policía, pedirle ayuda a sus familiares o disparar al aire, teniendo en cuenta que su vida no estaba en riesgo.


Argumentos diferentes
En su relato sobre los sucesos de esa noche, Boja sostuvo que Espinosa estaba armado y junto a otro muchacho. El camionero contó que los descubrió mientras intentaban sustraerle cosas del camión y que cuando salió a la puerta uno de los pibes le apuntó con un arma. En ese momento, dijo, la escopeta que portaba se disparó accidentalmente al rozar las rejas de hierro que protegen el frente de su domicilio. El otro joven nunca apareció y tampoco fue hallada un arma en el lugar.

El primer juez del caso, Osvaldo Barbero, creyó en la versión de Boja. Dos veces le dictó el sobreseimiento al entender que actuó en defensa propia. En las dos ocasiones la Cámara Penal dictaminó en contra, hasta que la causa cambió de juzgado. Finalmente el juez de Instrucción Nº 14, Adolfo Prunotto Laborde, procesó al camionero por "homicidio simple con dolo eventual". Y dio por cierto que Cristian estaba robando junto a otro sujeto.

Los padres del muchacho sostienen enfáticamente lo contrario desde su participación en la agrupación Padres del Dolor. La madre de Cristian, Nora Ojeda, asegura que su hijo estaba orinando cuando fue baleado. Como actores civiles también presentaron sus conclusiones, en las que adhirieron al pedido de la fiscal y reclamaron un resarcimiento civil. El abogado de la familia Espinosa, Carlos Varela, anticipó que la semana próxima solicitarán que se revoque el estado de libertad de Boja.

La esquina donde estaba estacionado el camión y fue baleado el joven.