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jueves,
15 de
diciembre de
2005 |
El cocalero Evo Morales supera en cinco puntos al derechista Jorge Quiroga
Bolivia, polarizada por las presidenciales
A cuatro días de los comicios, ninguno de los candidatos obtiene mayoría de votos. Definiría el Congreso
La Paz. - Los bolivianos aparecían divididos en dos a pocos días de los comicios presidenciales del domingo, con el líder cocalero Evo Morales liderando un sondeo de opinión difundido ayer, pero sin alcanzar la mayoría necesaria para llegar al gobierno. La falta de un claro vencedor en los comicios agrega incertidumbre a un país cuya alta conflictividad social le costó el puesto a dos mandatarios en poco más de dos años y de cuyas reservas de gas natural dependen Argentina y Brasil.
De acuerdo con un sondeo publicado por el diario La Prensa, Morales obtendría el 34,2% de los votos, superando por cinco puntos porcentuales a su principal rival, el ex presidente derechista Jorge Quiroga, con un 29,2%. El dato muestra una leve alza en la popularidad del líder indígena, que se ganó la simpatía de los sectores más pobres, especialmente campesinos en el occidente del país, con un discurso anti Washington y promesas de aumentar el control del Estado sobre las enormes reservas de gas natural.
Si ningún candidato obtiene al menos la mitad más uno de los votos, el Congreso bicameral surgido de las mismas elecciones deberá reunirse en enero para definir al presidente que guiará los destinos de la nación más pobre de Sudamérica en los próximos cinco años.
Incertidumbre e inestabilidad
Según analistas, la posibilidad de que el Poder Legislativo defina al nuevo mandatario y no el voto popular es un hecho habitual en la historia boliviana, aunque es un factor más de inestabilidad que se suma a una constante de violentas protestas motorizadas por el hambre y la miseria. "En el país tenemos dos niveles de incertidumbre. Primero, el resultado electoral y segundo cuál va a ser el resultado en el Parlamento. Es parte de nuestro ritual democrático", explicó el analista político César Rojas.
En un acto de campaña el martes en La Paz, uno de sus bastiones, Morales suplicó a los miles de enfervorizados seguidores que lo escuchaban que redoblen sus esfuerzos para obtener la "mayoría absoluta" en los comicios.
Horas antes, el líder indígena había denunciado la posibilidad de un fraude electoral por la supuesta aparición de votantes duplicados en los padrones, en una jugada que parecía intentar ganar la atención del votante indeciso.
Según el sondeo, los indecisos podrían tener un papel protagónico, al alcanzar aún al 11,6% de electorado. En tanto, el 10,7% de los 4.800 sondeados entre el 7 y el 11 de diciembre afirmó que haría impugnar su voto o sufragaría en blanco.
Otro rol preponderante lo podría jugar el centrista magnate del cemento, Samuel Doria Medina, que con un 8,9% de las preferencias tiene en sus manos prácticamente la definición del próximo presidente, en caso de tener que tomar la decisión el Congreso.
En La Paz, los seguidores de Morales se muestran atemorizados de que el Poder Legislativo pueda volcar la elección a favor de Quiroga, un ex ejecutivo de IBM en Texas que fue presidente interino entre el 2001 y 2002, tras la renuncia del entonces mandatario Hugo Banzer por enfermedad. "Evo es el único que puede ayudar a los pobres. Pero no lo van a dejar llegar. Los poderosos siempre complotan contra los pobres, más aún cuando queremos usar nuestros recursos naturales para combatir la pobreza", dijo Santos Aliaga, un joven taxista.
Las disputas entre los bolivianos sobre cómo aprovechar mejor las riquezas gasíferas, que incluyeron demandas de nacionalización y protestas contra exportaciones, fueron el caldo de cultivo para la caída de los presidentes Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Mesa.
Senado opositor
Aunque aventaja por cinco puntos porcentuales a Quiroga, el líder cocalero apenas triunfaría en tres de los nueve departamentos en los que está dividido Bolivia. Según el sondeo, Morales ganaría en los distritos con mayor presencia campesina como La Paz y Cochabamba, mientras que Quiroga se quedaría con los más ricos como Santa Cruz y Tarija, donde están ubicada gran parte de las reservas de gas natural.
Esa distribución del votos dejaría al partido de Quiroga, Podemos, con el control del Senado, lo que afectaría la gobernabilidad de una potencial administración dirigida por el Movimiento al Socialismo de Morales. Tampoco tiene asegurado el vencedor de los comicios del domingo un porcentaje de la Cámara de Diputados proporcional a los votos que reciba, debido a un complejo mecanismo electoral. (Reuters)
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Observadores de la OEA presencian un mitin de los partidarios de Evo.
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