|
martes,
11 de
octubre de
2005 |
Un paseo
libre de humo
En las últimas tres semanas hemos salido junto a tres familias amigas a pasear, almorzar, cenar y al cine. Esto no es algo casual o circunstancial, sino que se viene repitiendo en los últimos 23 años de mi vida que lleva 39. Entonces, ¿qué hay de diferente, de raro, de distinto? La novedad es que lo hemos hecho en el shopping Alto Rosario porque es un lugar donde se puede pasear sin tener que estar recibiendo el humo de quienes fuman. Hemos visto con sumo agrado el respeto con el que el personal de seguridad le pide a la gente que apague el cigarrillo. Así, no debemos ser nosotros quienes siempre tenemos que estar en problemas buscando un lugar donde caminar tranquilos o poder sentarnos a comer sin tener que soportar el terrible y (según manifiestan) sumamente placentero puchito. De aquí se desprende una cuestión a tener en cuenta: ¿el hecho de restringir el cigarrillo es beneficioso económicamente o no? Mis años de salidas nocturnas, boliches y demás ya han pasado, pero cuánto más lindas hubiesen sido si pudiesen haber transcurrido libres de humo. Sí, ya sé, la noche, el bar, la salida sin un cigarrillo no es lo mismo, pero tengamos siempre en cuenta que la mayoría no fuma y, como le ocurre a este shopping, el hecho de no dejar fumar ha dado como resultado que aumente considerablemente la concurrencia de público (al menos esa es mi percepción). No quiero entrar en el común y cierto terreno del fumador pasivo dentro de un ambiente laboral donde somos libres de elegir nuestra forma de vivir, pero tengamos en cuenta que también existe gente a nuestro alrededor que quiere o al menos desea tener la libertad de elegir la forma de morir, y no siempre ésta es aspirar el humo de los demás.
Héctor Mario Foulques
N. de la R.: En rigor, este shopping ha adoptado por su propia voluntad lo que el resto de los lugares públicos y privados de Santa Fe deberá hacer a partir de que se reglamente la nueva ley provincial 12.432. La norma establece la prohibición de fumar en todos los lugares cerrados, tanto públicos como privados (no habrá sectores para fumadores y no fumadores), como empresas, comercios, oficinas, bares, restaurantes, discotecas, instituciones educativas, terminales de transporte público y shoppings, entre otros.
enviar nota por e-mail
|
|
|