Al menos 350 inmigrantes lograron infiltrarse en España

Melilla.- En el mayor intento masivo de cruce de fronteras, alrededor de 700 personas buscaron infiltrarse esta madrugada en el enclave español de Melilla, norte de Marruecos, de los que 350 lo lograron, según informó la Guardia Civil española.

Se trata de la mayor de las avalanchas de inmigrantes que intentaron infiltrarse en los enclaves españoles de Melilla y Ceuta, cuyas fronteras fueron reforzadas con cientos de soldados españoles la semana pasada, tras la muerte de cinco inmigrantes, baleados cuando intentaban saltar la valla fronteriza.

El nuevo intento de infiltración masivo se produjo sobre las 5.30 de la madrugada (0.30 de Argentina), cuando la doble valla fronteriza de alambres de púas que rodea Melilla "cedió en varios tramos ante la avalancha de inmigrantes", informaron fuentes de la guardia civil.

Esta vez los inmigrantes no cruzaron, como es habitual, por el bosque de Rostrogordo, donde la valla fronteriza sólo tiene tres metros, sino en la zona del Barrio Chino, donde la altura de la doble alambrada es de seis metros.

La Delegación del Gobierno central en Melilla precisó en un comunicado que el número de inmigrantes que lograron entrar en Melilla es de 350, de una avalancha formada por más de 650 subsaharianos.

Además, se informó que las fuerzas de seguridad marroquíes detuvieron a 90 inmigrantes, aunque no pudieron evitar la avalancha ya que solo disponían de un pequeño grupo de gendarmes en su territorio.

En el cruce, 135 inmigrantes resultaron heridos, cinco con fracturas y cortes que precisaron intervención quirúrgica, así como también siete guardias civiles y soldados, agrega el comunicado.

"Un efectivo de la Guardia Civil sufrió un traumatismo craneoencefálico al recibir el golpe de una piedra en la cabeza, pero hasta el momento no es de mayor gravedad", informaron las fuentes.

Según coinciden los relatos de testigos en el lugar, varios de los inmigrantes que protagonizaron los hechos lanzaron piedras mientras los efectivos de la Guardia Civil y soldados utilizaron material antidisturbios.

Uno de los soldados heridos recibió "mordeduras" de un inmigrante, mientras otro fue afectado por el impacto de una piedra en un ojo, relató un periodista desde la zona en conflicto.

El último intento de infiltración masiva de inmigrantes se produjo el pasado viernes, cuando unas 50 personas intentaron introducirse en Melilla pero fueron detenidas por las fuerzas de seguridad marroquíes.

Desde el jueves pasado, unos 480 militares españoles -que serán elevados a 640- vigilan las fronteras de Ceuta y Melilla, luego de que cinco inmigrantes subsaharianos murieron baleados al intentar cruzar la frontera en Ceuta.

Los intentos masivos de infiltración en España a través de los enclaves españoles de Ceuta y Melilla, se incrementaron en las últimas semanas con la desesperación de los inmigrantes que ven avanzar los trabajos de elevación de tres a seis metros de la doble valla de alambre con púas que rodea estas ciudades.

Asimismo, según reconoció la Secretaria de Estado de Inmigración española, Consuelo Rumí, la presión inmigratoria aumentó en Ceuta y Melilla debido a que los subsaharianos se vieron impedidos a llegar en pateras (embarcaciones precarias) a España a través del estrecho de Gibraltar y las Islas Canarias, las que se encuentran fuertemente custodiadas. (Télam)