El "popó" de los perros II

He leído con mucho interés la nota de la señora Beatriz del día 17 del corriente mes y me ha perturbado saber que es doloroso para los que pagamos impuestos, cumplimos con las leyes y obedecemos los decretos estar bastardeados por un sin fin de personas de carecen de vergüenza. Vivo en pleno barrio Martín, a metros del parque Urquiza, y tenemos en mi edificio parques que eran muy bonitos hasta que se convirtieron en baños para los perros que viven en los departamentos. En el edificio pagamos un servicio de jardinería para que saque los excrementos de los perritos y muchas veces debemos subir o bajar por las escaleras porque por el ascensor viajan las mascotas y dejan pelitos que se adhieren a nuestra ropa o bien huelen metiendo el hocico en las bolsas que traemos. El portero limpia y al rato los animales (sueltos, sin correa) hacen pipi y popó (como dicen sus dueñas) en el jardín, y al salir del mismo embarran todo (quedan los cerámicos como veteados). Y no hablemos cuando no están sus dueños en los departamentos, ya que les aseguro que Pavarotti es una pavada al lado de los perros tenores que tenemos. Los derechos humanos defienden a los perritos pero a los que trabajamos, después de estar toda una noche escuchando conciertos caninos, que nos parta un rayo.

DNI 4.104.512