Martes 13: algunos osados desafiaron a la mala suerte

Sin ninguna superstición, Vanesa y Ariel se casaron

El mito popular advierte que los martes y los viernes hay que evitar casamientos y embarques, y más aún un martes 13; porque puede tentar a la desgracia. Y hasta hay quienes creen que el número 13 por sí solo llama a la mala suerte. Sin embargo, unos pocos osados decidieron ayer desafiar todos los presagios y pasaron por el registro civil de Juan Manuel de Rosas al 800. Ese fue el caso de Ariel Ruiz, de 26 años, y Vanesa Chiappa, de 28, que se casaron sin ningún tipo de temor en una fecha tan especial.

Sin supersticiones, los novios encararon el viejo edificio para unirse en matrimonio, dieron el sí y a la salida no faltaron ni el arroz ni los aplausos. Eso sí, nadie sabe si la novia, o quizá el novio, llevaba escondida una cinta roja para espantar a la mala suerte, un artilugio que muchos usan contra la envidia.

Pese a que hay quienes dicen no considerarse supersticiosos, lo cierto es que cada martes 13 son muy pocos los que deciden casarse y desafiar los malos presagios de la cultura popular.

Pero el mito sobre este día es sólo una de las creencias que todavía persisten y que muchos, sólo por las dudas, deciden evitar. Así, otros se niegan a caminar por debajo de las escaleras o vestirse de amarillo, y ni hablar si un gato negro se cruza en el camino o un espejo se rompe, porque acarrea siete largos años de desgracia.

Sin embargo, no todas las supersticiones atraen a la mala suerte. Los dichos populares dicen que si pica la palma de la mano es porque obtendrá dinero, al igual que si se golpea el codo o se pisa caca de perro, a raíz de lo cual el infortunado recibirá un regalo.

Lo cierto es que sólo queda un martes 13 en el año, el de diciembre. Habrá que sobrevivir a él y ya se verá si algún osado decide desafiar nuevamente a la mala suerte.

Vanesa y Ariel dieron el sí en el registro civil de Juan Manuel de Rosas al 800.