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 sábado, 27 de agosto de 2005  
Debate clásico
Bauza, Balbis, Basualdo y Dezotti hablan del clásico II

Mauricio Tallone / Ovación

¿Sabés por qué Dezotti todavía no llegó?", chicaneó con gracia Fabián Basualdo a su amigo y ex compañero de vueltas olímpicas en Newell's. El ex defensor y Jorge Balbis fueron los primeros en arribar a la cita, pautada para las 11 en el salón de reuniones de la La Capital. Enseguida llegó Edgardo Bauza y por último el Galgo Dezotti, cuya explicación de la demora contradijo el augurio inicial de Basualdo.

No hubo necesidad de preámbulos. Ni siquiera calentaron motores. Se tiró el tema central del debate y los cuatro monopolizaron la palabra. El partido revancha por la Copa Sudamericana que se avecina fue el testigo invisible para reunir a Edgardo Bauza, Jorge Balbis, Fabián Basualdo y Gustavo Dezotti. El disparador ideal para prenderse en una charla apasionada y sin barreras. El clásico rosarino químicamente puro. Desmenuzado por cuatro voces representativas en la historia de cada club.

"Para mí el partido del lunes tendrá la misma tónica que el que jugaron en el Coloso. Central supo cortarle el circuito futbolístico a Newell's y a partir de eso desarrolló su idea. No creo que se vea un clásico abierto y con los dos equipos jugados al ataque", arrancó pisando fuerte Bauza.

"Lo que pasa es que ahora Central está obligado a plantear el partido diez metros más adelante. Juega con su gente a favor y eso influye a la hora de pensar un partido de estas características", contestó Dezotti, desafiando la teoría que había intentado desarrollar el Patón.

"Ojo con Central", levantó la voz Balbis. "Mirá que en el Coloso jugó como si fuera local y demostró que tiene con qué ganarle a Newell's. Si los volantes, como el pibe Calgaro, Andrés Díaz, Ferrari y Papa, agarran la pelota y pasan con velocidad al ataque, pueden complicar tranquilamente a Newell's", completó el ex zaguero canalla y le dio pie a Basualdo para que dijera lo suyo.

"No me parece que Central modifique su estilo de juego. Sabemos que juega con cuatro volantes con mucha movilidad, que ocupan posiciones ofensivas muy rápido y sin un enganche definido. Además, Cuffaro Russo ya tiene el equipo más o menos armado. La historia pasa por saber cómo formará Newell's. No sé si Olmos se animará a juntar de nuevo a Manso con Ortega, siempre y cuando el Burrito llegue en óptimas condiciones", se autoconsultó el ex defensor leproso.

"La verdad, no creo que los ponga de nuevo", contestaron a dúo el Galgo y el Patón.

"Además, ya los puso en el partido de ida y no le funcionaron", se extendió Bauza.

"La localía es una ventaja para Central. A mí siempre me gustó definir en el Gigante más allá de que el gol de Newell's valga doble. Quiero definir de local", señaló Balbis.

"No, a mí me gusta definir siempre de visitante. Igualmente no nos olvidemos que es un clásico. Acá no importa cómo llegan, si uno ganó el último partido y todas las referencias que se puedan realizar. Acá no vale nada. Porque si empezamos a hilar muy finito, Central tiene un equipo armadito y un esquema desde hace un año y medio está bien trabajado. En cambio, el técnico de Newell's todavía no encontró el equipo, no conoce al club como Cuffaro a Central. Todo eso se termina en el momento de entrar a la cancha", dijo Bauza.

"¿Sabés por qué pasa eso, Patón?", entró en escena Balbis. "Si yo fuera Cuffaro también estaría muy tranquilo con el momento que atraviesa Villa. Es importantísimo que el goleador de tu equipo ande derecho. No nos olvidemos de que el clásico es el partido que todos quieren ganar. Pero también es el que nadie quiere perder. Y este clásico tiene la particularidad que alguien tendrá que perder", añadió Balbis.

Los cuatro coincidieron en que "si van quince minutos del segundo tiempo y el partido está cero a cero, se define a los penales".

"Muy difícil que alguien arriesgue. Inconcientemente el jugador sabe que, de última, tiene la chance de los penales", lo dijo el Patón y todos aprobaron con un simple movimientos de cabezas.

"Se define con una pelota parada. De hecho, el último clásico en el que hubo un ganador se definió con un cabezazo de Maidana", fue más allá Basualdo.
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Balbis, Bauza, Basualdo y Desotti jugaron su propio partido.

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