vacaciones

de familias que llevaron a sus hijos a disfrutar de una película u obra de teatro. Y en horas pico no faltaron quienes debieron desistir del intento porque no encontraron ni una mesa vacía.

Por el Portal Rosario circuló un promedio de 20 mil personas por día, de las cuales entre 3 mil y 4 mil correspondieron a chicos que fueron a ver las obras de teatro "Sirenita" y "Cenicienta".

"En estos días pasó tanta gente que parecía un fin de semana. En el patio de comidas hubo que agregar sillas. Y la capacidad de la playa de estacionamiento estuvo ocupada al 100 por ciento en todos los horarios", indicó la coordinadora de relaciones públicas y marketing, Cecilia Caprile.

Mientras que el Alto Rosario y el Shopping Del Siglo multiplicaron por tres y por dos su concurrencia respectivamente. En el primero también advirtieron que se duplicaron las ventas y recibieron mucha gente que visitó la Vidriera de Cordic situada al lado del shopping.

Los pronósticos para la semana próxima son optimistas. "Esperamos recibir todavía más gente para los días restantes de las vacaciones", subrayó la coordinadora de marketing del Alto Rosario, Romina Freijomil.

En el paseo de compras del centro, el incremento en las ventas vino ligado a las liquidaciones que ya lanzaron algunos locales.


Carne, pescado y tango
Las vacaciones tampoco dieron descanso a los locales gastronómicos. De estos los más beneficiados resultaron tres rubros: las parrillas, los que ofrecen pescado de río, y los que incluyen espectáculos relacionados con el tango, una demanda presente principalmente entre los contingentes de extranjeros.

"Sin mentir, estamos trabajando todas las noches a salón lleno", sostuvo la encargada de la parrilla La Estancia, Lilia Clavero. A la clientela fija que tiene el restaurante esta última semana se sumó la presencia de "cualquier cantidad de brasileros y centroamericanos" que llegaron a la ciudad para participar del Congreso Latinoamericano de Antropología que se realizó en la facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario.

Y la demanda fue tal que esta semana no se encontró una mesa vacía tanto en el turno de las 21.30 como en el segundo de las 23.30. "Si alguien llegó a comer después de las 9, tuvo que esperar dos horas para poder entrar", destacó Clavero.

En el restaurante Escauriza, donde el plato fuerte es el pescado de río, circularon varios extranjeros de los sitios más lejanos, como Africa. "Vinieron a comer tres africanos, que estaban recorriendo diversos lugares del país, y se quedaron fascinados con el pacú", dijo el padre del encargado, Andrés Escauriza, quien añadió que allí se incrementaron los clientes entre un 30 y 40 por ciento más de lo habitual.

Por las tanguerías también están apareciendo "caras extrañas", generalmente extranjeros que llegan desde España, Italia y hasta Japón. "Normalmente llegan después de consultar en los hoteles dónde pueden ver un espectáculo de tango" señala César Borgonovo, dueño de El Refugio. Pero de todas formas aclara que "si bien últimamente estos contingentes son más frecuentes, tampoco se puede decir que todos los fines de semana se reciba gente de afuera".