FIRMAT

Quiso huir de una comisaría, baleó al jefe y lo hirieron

Firmat.- El jefe de la comisaría 4ª de esta ciudad, Pilar Dobal, resultó herido de bala en un enfrentamiento armado que tuvo lugar dentro mismo de la seccional. El cruce de disparos se produjo la noche de ayer cuando un hombre que había sido arrestado en averiguación de antecedentes le sustrajo el arma reglamentaria a una agente y pretendió escapar a los tiros. El ataque fue repelido por los uniformados y terminó frente a la dependencia policial, donde la vereda quedó regada de casquillos de balas 9 milímetros.

Todo se desencadenó a partir de las 21.30 de ayer cuando una comisión de la comisaría 4ª, dependiente de la Unidad Regional VIII, arrestó por averiguación de antecedentes a un hombre al que "sorprendió en situación sospechosa en una parada de ómnibus ubicada frente al arco de ingreso a la ciudad", dijeron los voceros.

Desde allí el hombre fue trasladado a la seccional, ubicada en la céntrica esquina de San Martín y Entre Ríos, y alojado en una habitación a la espera de que los policías de guardia pudieran identificarlo y chequear sus antecedentes. En esas circunstancias, según dijeron anoche fuentes policiales, "le arrebató el arma reglamentaria a una agente y la tomó por el cuello para dirigirse hacia la puerta con intenciones de escapar. Entonces empezó a disparar contra los uniformados que quisieron impedir la huida y éstos repelieron la agresión".

Así las cosas, se generó un intenso intercambio de disparos dentro de la seccional. Uno de los proyectiles alcanzó al comisario Dobal en el rostro por lo que fue urgentemente trasladado a un hospital donde más tarde se comprobó que la herida (en el pómulo derecho) no revestía gravedad. En tanto, el maleante recibió dos balazos en las piernas, lo que impidió que huyera: el hombre cayó sobre el pavimento, a unos 30 metros de la seccional y junto a él quedó el arma que le había robado a la agente.

Al cierre de esta edición, el jefe de la Unidad Regional VIII, Julio Pallavidini, y la jueza de Instrucción de Melincué, Elizabeth Mangini, estaban dentro de la comisaría y se ponían al frente de la investigación del episodio bajo un cuidado hermetismo.