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domingo,
19 de
junio de
2005 |
Cuatro muertos en cuatro días
por los accidentes de tránsito
Murió en el Heca un ciclista que el viernes había sido atropellado en la zona
sur de la ciudad
Un hombre de 54 años falleció alrededor de la 1.40 de ayer en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez como consecuencia de las heridas recibidas el viernes, cuando fue atropellado por un automovilista en la zona sur de la ciudad. De esta manera, en los últimos cuatro días el tránsito rosarino se cobró otras tantas vidas estableciendo un triste promedio: un muerto cada 24 horas.
José Giménez, de 54 años, se trasladaba en bicicleta alrededor de las 7.30 del viernes cuando en la intersección de Ovidio Lagos y Presidente Quintana fue embestido por un automóvil Chevrolet conducido por Juan Faccendini, de 61 años.
Como consecuencia de la embestida, Giménez resultó con politraumatismos graves y debió ser trasladado de urgencia al Heca, donde pese a los esfuerzos realizados por el personal médico falleció la madrugada de ayer.
La trágica saga de muertes se inició el miércoles, poco antes de las 16, cuando Paula Yolanda Ramos, de 13 años, circulaba en su bicicleta por el carril rápido de bulevar Rondeau. Por motivos que aún los peritos estudian, la chica fue atropellada por un Chevrolet Corsa que era conducido por un remisero de Granadero Baigorria. La nena volvía a su casa de Cavia al 1300 tras visitar a un familiar enfermo y falleció en el acto.
Un día más tarde, la noche del jueves, en el cruce de 27 de Febrero y San Nicolás, Hermelinda Hidalgo, de 45 años, falleció cuando intentaba cruzar y fue embestida por un Ford Falcon. La persistente llovizna que caía en ese momento y la mala iluminación de la zona pueden haber sido los desencadenantes de la tragedia, ocurrida a unos 50 metros del domicilio de la víctima.
El viernes, la parca que surca las calles de la ciudad se llevó la vida del pequeño Bruno Paniagua, de 6 años, quien esperaba cruzar la avenida Provincias Unidas a la altura de Juan B. Justo. El menor estaba junto a su mamá, Florinda Noriega, de 46 años, quien como consecuencia del golpe que les dio un Renault 12, sufrió múltiples fracturas en sus miembros inferiores. Según las primeras averiguaciones hechas por la policía, el conductor del auto realizó una mala maniobra para evitar chocar con otro vehículo y subió al cantero central de la avenida donde las víctimas esperaban poder cruzar.
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