La actriz dijo que su trabajo en "Doble vida" es el mejor rol de su vida

Claudia Lapacó: "Quien quiere ser actor por la fama, por el rating o la plata, no es actor"

En la tira encarna a una agente de seguridad y dijo que la pasión y la formación impulsaron su profesión

Rodolfo Bella / Escenario

Claudia Lapacó aceptó el reto de interpretar tres personajes diferentes: una agente de seguridad, una madre ejemplar y una mujer de la vida. Lo hace en televisión, en la tira juvenil "Floricienta" y en "Doble vida" y, en teatro, en la obra "La profesión de la señora Warren", en la que actúa bajo la dirección de Sergio Renán. Pese a su larga y sólida trayectoria, la actriz aseguró a La Capital que se siente optimista porque lo mejor es "lo que está sucediendo hoy".

-¿Desde dónde encara el trabajo cuando tiene que interpretar dos personajes dispares como los de "Floricienta" y "Doble vida"?

-En "Floricienta" hice doce capítulos, pensando en mis cuatro nietos, suponiendo que les iba a gustar ver a su abuela en su programa preferido. Ahora estoy felicísima con "Doble vida" porque considero que es el mejor rol de televisión que me tocó hacer.

-Es un elogio muy grande, ¿por qué dice eso?

-Porque es un rol muy alejado de mí, es una persona que no se parece para nada a mí. Generalmente me dan las madres buenas, comprensivas... Este es un rol muchísimo más complejo. Es una mujer muy simple, vulgar, mal hablada, bastante violenta en su relación con su papá y con su nuera. Adoro hacerlo porque todo lo que hago es composición. Son cosas que me divierte ponerle y que no haría una dama. Por suerte, no lo ven mis nietos porque si no me dirían por qué hago todo lo que les digo que no hagan (risas).

-¿Cómo reconoce el límite para no caer en el estereotipo?

-Siempre está ese miedo, pero siempre lo hacemos pensando que es lo mejor que podemos hacer. No digo que siempre se consiga, pero trato de estar muy atenta. De todas maneras, cuando nos toca un personaje complejo creo que no hay límite. Cuando uno acepta hacer una tira es un poco como dar un salto sin red porque uno no sabe en qué se va a transformar el personaje.

-Con "Resistiré", donde también trabajó, ¿pasó algo parecido?

-Sí, pero ahí justamente mi personaje fue muy definido siempre. Todos me decían por la calle, "Usted es tan buena, cómo me gustaría tener una madre como usted..." Pero bueno ¡basta, basta de madres tan buenas...! (risas). Yo sé hacer otras cosas también. Ahora de verdad, el personaje de "Resistiré" era maravilloso y lo disfruté muchísimo. Además fue tan placentero ver las actuaciones extraordinarias de mis compañeros. Pero es el pasado y siempre digo que me parece maravilloso lo que me está sucediendo hoy.

-¿El rumbo de las tiras lo marca el rating?

-No es sólo el rating. Creo que los mismos autores se van encariñando con ciertos actores o les gusta como salió el personaje. Yo no soy una actriz que hable con los autores porque me parece que la creación tiene que ser algo de gran libertad. Si el autor tiene en su cabeza una línea, no tengo porqué ir a torcércela. Yo tengo que tener libertad en mi actuación y ellos en su escritura. Yo lo siento así y no es la idea de todo el mundo, pero la creación tiene que ser hecha en libertad.

-Una opinión opuesta al divismo del personaje de Margo Channing, que hizo en "Aplausos"...

-Con Margo tal vez me identifique por mi pasión por el teatro. Pero el diviso no es para nada mi caso. Sucede que a veces el actor puede tener miedo de perder su lugar, pero creo que hay lugar para todo el mundo. A veces le toca a uno y a veces a otro. Yo en mi larga carrera demostré que puedo hacer de todo, café concert, revista, musicales, dramas, comedias; voy de sótanos a las mejores salas y después hago gira. Lo importante es hacer y no el lugar que ocupa. Todo lo que hice, en el momento que lo hice, por una razón o por otra era lo mejor que me podía pasar. Lo que me gusta hoy es tener la misma curiosidad para atacar un personaje que cuando tenía 20 años.

-¿Qué tipo de influencia puede tener en las generaciones nuevas de actores que se formaron y crecieron con la presión por el rating?

-Quien quiere ser actor por la fama, por el rating, por la plata y por las tapas, no es un actor. El actor que entra en esto tiene que formarse y tiene que tener una pasión desmedida y sentirse que es un animal de teatro y que sin eso no va a vivir, pero que no va a vivir por su espíritu y no por lo que coma.

-¿Siente que es un privilegio estar trabajando, y además en un programa exitoso?

-Me siento muy agradecida a la vida, pero tuve mis momentos de no trabajar absolutamente nada. Creo que todo lo que me aparece es por lo que hago. Nadie me regala nada. Nunca me eligieron a dedo. Todo lo hice trabajando y me siento muy orgullosa de eso. En este momento estoy en un lugar de brillo, pero tampoco me tengo que ilusionar que será siempre así. Así es nuestra profesión. Sin embargo es maravilloso haber hecho toda la vida lo que me gusta. Yo no soy comerciante, nunca me interesó el dinero; cuando entra es una suerte y cuando no hay, uno trata de sobrevivir, pero no es la prioridad de mi vida.

"Yo no soy comerciante; nunca me interesó el dinero. Cuandop está es una suerte, pero no es la prioridad en mi vida", dijo Lapacó.