Precoloquio. Las amenazas sobre el crecimiento económico fueron analizadas por hombres de negocios y especialistas en el encuentro de Idea

Energía: los empresarios piden que el gobierno se ponga las pilas

Argentina deberá invertir al menos 1.200 millones de dólares para no entrar en una crisis en 2007

Patricia Martino / La Capital

La situación energética sigue ocupando la cabeza de los empresarios argentinos. El tiempo pasa, los problemas continúan y el crecimiento económico del país se ve amenazado. Análisis y propuestas para saldar el tema no faltan. Por el contrario, abundan y, desde una u otra óptica, van en una dirección: es necesario invertir en la exploración y en el transporte de gas.

Durante el precoloquio del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (Idea) que se realizó el jueves pasado en la Bolsa de Comercio de Rosario, y al cual asistieron 400 empresarios de primera línea de todo el país, se discutió la problemática del sector energético.

Los hechos que se sucedieron en la economía argentina desde los inicios de 2002 alteraron el funcionamiento de los sistemas de incentivos para el desarrollo de inversiones en el sector energético, necesarias para acompañar el incremento de la demanda impulsado por el crecimiento económico del país. En ese contexto, la dependencia del gas natural, en un país que antes se asumía gasífero pero que ahora necesita importar volúmenes crecientes, es el tema central de una estrategia energética de largo plazo cuyo análisis y definición todavía está pendiente.

Alfredo Coto, presidente del 41º coloquio de Idea que se realizará del 23 al 25 de noviembre en Mar del Plata, consideró que "todavía no se tomó conciencia" de la problemática energética.


Inversiones millonarias
El ex secretario de Energía y ahora consultor en la materia, Daniel Montamat, estimó que la Argentina va a necesitar inversiones en el sector por 52.000 millones de dólares de aquí a 2020 para sostener un ritmo de crecimiento del 5% anual del PBI, o de al menos 32.000 millones si se crece al 3% anual.

"Hay que descubrir gas nuevo, hay que invertir en exploración y en transporte, si se dan todas las obras previstas estaremos mejor, pero con un crecimiento del 3% anual se necesita un nuevo gasoducto troncal", precisó.

Para el analista "la energía no puede ser rehén del corto plazo" y es necesaria una ley de hidrocarburos porque "la energía es una estrategia de desarrollo económico y social".

Bajo las actuales condiciones, Montamat estimó que la oferta de energía podría entrar en crisis en 2007 o a más tardar en 2011 si no se realizan obras como las de Yacyretá, para subir la cota de la represa. En este escenario queda descartado el posible aprovisionamiento de gas desde Bolivia debido a los conflictos políticos internos.

Montamat advirtió que el país cuenta con una reserva de petróleo de 10 años y de gas natural por 12 años. Actualmente la participación del consumo es del 48,4% para el gas y del 37,6% de petróleo pero para el 2020 la dependencia al gas podría aumentar al 56%.

En este escenario, el especialista estimó un crecimiento de la demanda de gas natural del 3,34% anual y de energía eléctrica del 4,04%. En cuanto al petróleo el aumento sería del 2% anual.

Asimismo, el analista consideró que en el período 2005-2008 habrá 100 mil nuevos usuarios por año, en 2009-2015 unos 214 mil usuarios y entre 2016 y 2020 seis mil.


Los precios
En cuanto a la recomposición de los precios, Montamat prevé que el gas natural tomará como referencia el mercado regional, mientras que el crudo y sus derivados, la referencia internacional, y la electricidad mayorista retornará al sistema de precios marginales.

Alejando Sruoga, quien también fue secretario de Energía, ubicó un pico de crisis energética en 2007, partiendo de la base de un incremento de la demanda de energía del 7% anual.

El ex funcionario consideró que si en el año y medio que queda por delante no se llevan a cabo inversiones programadas por entre 1.200 y 1.600 millones de dólares en generadoras de ciclo combinado "existe entre un 5 y 6 por ciento de posibilidades tener cortes de 3.000 megawats y hasta un 20% de cortes de 600 megawats".


Echale gas
Consideró entonces que la estrategia pensada por el gobierno para resolver el problema energético "funciona con gas, pero no está segura la fuente" en obvia referencia a la situación de Bolivia.

Es que el gobierno nacional encaró la solución de la problemática energética en base a la instalación de generadoras de ciclo combinado que funcionarían en base al gas boliviano. El otro problema es que se necesita un financiamiento que hasta el momento no apareció.

Respecto de los precios para 2007, Sruoga estimó que sin la instalación de la generadora de ciclo combinado y con un aumento de la demanda del 5%, los precios rondarán los 54 dólares por mwh y, con una demanda del 7%, los 90 dólares por mwh. En cambio, si se realizan las obras, los precios oscilaran entre 30 y 35 dólares/mwh para el primer caso, y entre 33 y 46/mwh dólares para el segundo.


El escenario regional
Una visión más regional la aportó el interventor de la Empresa Provincial de Energía (EPE), Luis Obeid. Expresó su preocupación por la situación de las industrias santafesinas vinculadas a la soja y la lechería ante la caída del proyecto del Gasoducto del Nordeste, por la situación boliviana.

En tanto, mencionó que "la reactivación económica y el cambio de la matriz energética a gas-dependiente, lleva a un déficit por falta de fluido". Por lo tanto, es necesaria la inversión en exploración y transporte.

Para saldar la problemática en la provincia, Obeid señaló que es necesario construir el gasoducto del NEA y ampliar la generación de energía eléctrica en Rosario Oeste, Ramallo y Santo Tome. "El gas es esencial en la provincia, es imprescindible que las obras se realicen como están planteadas", remató el titular de la EPE.

Por último, y con una mirada más positiva, el director de Enarsa, Aldo Ferrer, dijo que la Argentina es "afortunada" por contar con "una oferta diversificada" de fuentes de energía, porque cuenta con potencial tecnológico y debido a que "las inversiones necesarias equivalen a menos del 10% de la inversión bruta fija, lo que implican montos manejables".

El funcionario defendió la presencia de empresas estatales en el mercado energético y calificó a Enarsa como una especie de corporación de fomento energética. En cuanto a la integración energética regional señaló que "para integrar un anillo energético del Mercosur es necesaria una empresa estatal y Enarsa se compromete a estar presente".

Los analistas consideraron que la energía es una estrategia de desarrollo económico y social.