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domingo,
19 de
junio de
2005 |
Pese a la crisis,
Lula sería reelecto
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sigue primero en las encuestas a pesar de las denuncias de corrupción y las crecientes quejas que enfrenta por su política económica.
Políticos, incluso de oposición, analistas y operadores de los mercados elogiaron la renuncia de José Dirceu, poderoso jefe de Gabinete y baluarte en el gobierno de Lula, anunciada el jueves para volver a su escaño de diputado.
En tanto, Lula continuará con la profunda reestructuración ministerial puesta en marcha en los últimos días, una vez que regrese de la cumbre de presidentes del Mercosur que se realiza en Asunción.
"El mercado está reaccionando bien a lo que podemos llamar blindaje", dijo Alvaro Bandeira, director de Agora Seénior CTVM. El viernes, dos encuestas mostraron que Lula, a pesar de que las acusaciones de que su Partido de los Trabajadores (PT) compró el apoyo de diputados golpeó a su gobierno, sería reelecto si los comicios de octubre del 2006 fueran inmediatos.
Un sondeo del Instituto Brasileño de Opinión Pública y Estadística (Ibope) reveló que la aprobación del gobierno de Lula cayó a 35% en junio, desde 39% en marzo. La encuesta, realizada por encargo de la Confederación Nacional de la Industria (CNI), indicó que la evaluación de mala o pésima para el desempeño del gobierno creció a 22%, desde 17, y la regular quedó estable en 41%. La calificación de cómo conduce el gobierno el presidente, también disminuyó a 55% en junio, desde 58% en mayo. Sin embargo, la encuesta indicó que Lula ganaría la reelección, aunque en una segunda vuelta, con un margen apenas menor que el indicado por el anterior sondeo en marzo.
"Los principales factores que contribuyeron a empeorar la evaluación del gobierno son las denuncias de corrupción involucrando a instituciones de la administración federal e integrantes del gobierno y la creciente desaprobación a la gestión de políticas públicas", dijo la CNI sobre la encuesta.
Según la CNI, se observó un aumento de la percepción negativa de la ciudadana sobre las acciones del gobierno para combatir la corrupción y las dirigidas a disminuir el desempleo, la violencia, el hambre y la pobreza. (Reuters)
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