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domingo,
22 de
mayo de
2005 |
Riesgo de derrumbe. Un incendio arrasó un local de dos plantas de la textil Fadete
Pérdidas totales en un comercio textil de calle San Luis
El fuego se desató a la 1.30 de ayer y los bomberos, tras apagarlo, trabajaban anoche enfriando las losas para
apuntalar el local. Ardieron los bienes del depósito y el calor destruyó el primer piso, donde vivían cuatro personas
La calle San Luis de los negocios de venta de ropa y fabricas textiles no lució ayer como de costumbre. Entre Italia y España, durante la madrugada, un incendió devoró un comercio de venta de telas al por mayor y menor. El siniestro, que también arrasó con un deposito de la empresa y un departamento ubicados en los altos del local, motivó el corte del tránsito hasta anoche en toda la cuadra. Según confirmaron fuentes de Bomberos Zapadores las pérdidas fueron totales y debieron apuntalarse las losas para evitar el derrumbe del espacioso establecimiento céntrico.
El desvío del tránsito a la altura de Dorrego y el penetrante olor a la tela quemada en el aire de la madrugada presagiaban que algo malo pasaba en la calle San Luis oeste, la cuadra textil por excelencia de Rosario. Aproximadamente a las 1.45 se desató el fuego en el local de la firma Fadeté, sucursal rosarina de la fábrica textil originaria de Buenos Aires. El local, de dos plantas, quedó seriamente comprometido por el fuego y el calor que soportaron sus estructuras.
"Uno de los muchachos que tiene su negocio en la misma cuadra se había ido a comer al club Argentino Sirio y cuando salió a la 1.45 vio la lengua de fuego y pensó que era su local. Se fue corriendo para allá", explicó ayer un comerciante del ramo consultado ante la negativa de los responsables de la firma siniestrada de brindar precisiones sobre el siniestro. Fadeté es una de las empresas más importantes del rubro. Tiene su base en Buenos Aires y sucursales en Rosario, Don Torcuato, Quilmes y Mendoza. "En Rosario están desde 1999. Este negocio es una sucursal directa de la firma reconocida por los pulloveres que hacen desde hace tiempo", explicó la fuente.
Con el cartel aéreo de la firma sobre las autobombas, tres dotaciones de bomberos comenzaron a desplegarse minutos antes de las 2 en San Luis 1760. A esa hora el humo envolvía la cuadra y los curiosos eran corridos por efectivos de la seccional 2ª y de la Guardia Urbana Municipal, más allá de un cordón de seguridad que los pusiera a resguardo. El local que la firma alquila es espacioso y llega hasta la medianera del club Argentino Sirio.
Los bomberos centraron sus esfuerzos en extinguir el fuego y evitar que el siniestro se propagara a los negocios limítrofes.
En la planta baja, además del local comercial, Fadeté tenía uno de sus depósitos, que comenzaba donde finalizaba el área de ventas. "Si bien la empresa vendía confección, el depósito estaba lleno de rollos de telas que ardieron", explicó una fuente policial que trabajó en el lugar. En el primer piso vivía una familia con sus dos hijos en un departamento. "La familia fue evacuada sin problemas. Tienen dos pibes de entre 10 y 14 años. Y además tres perros, que pobrecitos estaban como locos", contó el informante. En el segundo piso había otro depósito de telas. "Las llamas no llegaron hasta el segundo piso, pero lo que no consumió el fuego se perdió con el intenso calor que se produjo", comentó.
Mientras los Bomberos Zapadores controlaban el siniestro, sobre las veredas de la cuadra comenzaban a circular rumores sobre el origen del incendio. "Parece que alguien se olvidó una hornalla encendida en la cocina del local", comentó una comerciante. Oficialmente los peritos trabajaban anoche para determinar la causa. El negocio había cerrado al público el viernes a las 19. Allí trabajan entre 8 y 10 empleados y la gravedad del siniestro movilizó a la conducción de la firma desde Capital.
A media mañana el foco principal estaba controlado y dos de las dotaciones retornaron hasta el cuartel. "Todos los incendios son diferentes. Este se complicó porque el material parece que nunca termina de consumirse y hace mucho humo. Esto obliga a los bomberos a trabajar con máscaras y oxígeno", explicó un oficial de los Zapadores. "Como estaba muy denso, tuvimos que hacer tres boquetes en las paredes para poder trabajar desde afuera", amplió el bombero.
Con el tránsito cortado y las sombras de otra noche de sábado encima, los bomberos continuaban anoche enfriando las losas para apuntalar y evitar el tan temido derrumbe. "Hay que aguardar que los bomberos digan si todo está seguro como para que el tránsito vuelva a correr por San Luis", se dijo desde la GUM. Las perdidas fueron totales.
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Fotos
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Bomberos trabajaron en San Luis al 1700 en la madrugada de ayer.
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