|
domingo,
22 de
mayo de
2005 |
El Charrúa le ganó 3 a 1 a Almirante Brown
Córdoba crece en su
juego y suma triunfos
Gustavo Yarroch / Ovación
Desde el regreso de Oscar Santángelo, Córdoba consiguió el cincuenta por ciento de los puntos (9 sobre 18, con 3 victorias y 3 derrotas). La mejoría es clara en relación con la gestión de Cristian Domizi, quien dirigió al equipo en 13 partidos y consiguió apenas 2 triunfos. Pero el salto de calidad no se dio sólo en los números sino también en el nivel de juego: podrá ganar o perder, pero ahora puede verse un equipo más audaz, sin tantos rebusques tácticos y con un concepto de juego definido.
Este Córdoba es un conjunto que intenta atacar tanto de local como de visitante, pero también se preocupa por mantener un equilibrio, un orden defensivo capaz de protegerlo de sofocones innecesarios. Esa fórmula, la de priorizar la búsqueda del arco rival sin descuidar el propio, lo condujo a un 3 a 1 hecho a la medida del desarrollo.
Eso sí, hay que convenir que vencer a Almirante en su cancha dejó de ser una misión sólo apta para valientes, es que no suma de a tres desde hace 17 fechas.
Sabedor de que estaba ante otra buena oportunidad para seguir remontando una campaña poco feliz, Córdoba salió a agredirlo futbolísticamente y lo sorprendió con el juego de primera que propusieron sus volantes y delanteros. En los 25' iniciales hubo lapsos en los que se lo llevó por delante a puro juego asociado y llegada por las puntas. Sin embargo, la apertura nació de un grave error de Peralta, quien le regaló una pelota a Paredes. El enganche habilitó a Conocchiari, quien definió con frialdad de sicario ante el arquero.
El propio Peralta fue también el artífice del segundo gol: le cometió un penal innecesario a Marcos Del Bono y Conocchiari lo trocó por gol. Iban 26' y la chapa ya estaba 2-0.
Córdoba prefirió pararse de contragolpe en la etapa final y Almirante lo aprovechó para acercarse más a Ozafrán. Al minuto, una chilena de Ojeda pegó en el travesaño. Recién a los 28', y cuando parecía que el partido estaba resuelto, Peralta convirtió el descuento de arremetida. El local siguió atacando, pero con tantas limitaciones que apenas volvió a inquietar con un cabezazo desviado de Ojeda.
Ya en tiempo de descuento, un Córdoba que había sabido conservar la ventaja con inteligencia lo liquidó de contra vía Armani, que regresó después de dos meses.
El próximo fin de semana Córdoba recibirá a Morón en el cierre del torneo, otra buena ocasión para ratificar que va por el buen camino. Si a esta base de jugadores le incorpora tres o cuatro refuerzos de jerarquía, en el próximo campeonato tal vez pueda volver a pelear los primeros puestos.
enviar nota por e-mail
|
|
|