|
domingo,
22 de
mayo de
2005 |
Patrones de conducta: hábitos televisivos en los niños
La televisión puede tener un efecto negativo en los niños de entre uno y tres años. Un nuevo estudio apuntó que la visión de imágenes televisivas que se suceden rápidamente pueden sobrestimular el cerebro de los pequeños, y causar problemas de atención durante la etapa escolar.
El trabajo, publicado en la revista "Pediatrics", abarcó un total de 1.278 niños de un año y 1.345 de tres.
Los padres se encargaron de rellenar un cuestionario sobre los hábitos televisivos de sus hijos y, cuando cumplieron siete años analizaron su comportamiento empleando patrones similares a los que se utilizan para diagnosticar los trastornos de falta de atención: dificultad a la hora de concentrarse, actuar con cansancio y de forma impulsiva, y confundirse fácilmente son algunos de los problemas de atención mencionados por los padres (un 10 por ciento presentaron a los siete años este tipo de trastornos).
El diario The Washington Post señaló que estos resultados reafirman las recomendaciones de los especialistas para impedir que los niños menores de dos años se sienten delante de la pantalla. "La verdad es que existen muchas razones para que los pequeños no vean todo el día televisión.
Otros trabajos han demostrado que está asociado con obesidad y agresividad", señaló Dimitri A. Christakis, autor del estudio, quien señaló que las típicas imágenes televisivas que pasan a una velocidad irreal podrían alterar el desarrollo cerebral.
"El cerebro del recién nacido se desarrolla muy rápido durante los primeros dos o tres años", subrayó, y añadió que la sobreestimulación en esta etapa "puede crear hábitos en la mente que puedan llegar a ser dañinos".
Sin embargo, otro informe publicado también en "Pediatrics", manifestó que es necesario llevar a cabo más investigaciones que expliquen de forma más concreta cómo se pueden producir este tipo de alteraciones.
enviar nota por e-mail
|
|
|