Callejeros apuntará contra Chabán y el gobierno porteño

Los miembros del grupo comenzarán a declarar mañana en la causa Cromanón

Los integrantes del grupo de rock Callejeros intentarán deslindar la responsabilidad de la tragedia de Cromañón en el gerenciador del local, Omar Chabán, y en funcionarios del gobierno porteño a quienes acusarán de no impedir que se enciendan bengalas en los recitales antes de diciembre del 2004 y hasta de fomentarlas.

Mariano Silvestroni, el abogado que representa a los músicos que comenzarán a ser indagados por el juez Julio Lucini desde mañana, dijo que la estrategia defensiva será "impedir que le trasladen a Callejeros las responsabilidades que tuvieron Chabán y los funcionarios del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires" en la tragedia.

Para eso, intentarán demostrar "cómo era la mecánica habitual de los recitales de rock, en los cuales siempre se utilizaban bengalas y jamás fue suspendido alguno de ellos por orden del Gobierno porteño".

Por ese motivo, el letrado señaló que llevará ante el magistrado "un video explicativo" en el cual se observan escenas de 15 recitales de varias bandas de rock que permiten ver en el público el uso de pirotecnia.

Además, presentarán detalles de lo ocurrido en un recital de Callejeros de julio del 2004 en el estadio de Obras, el cual fue supervisado por cuatro fiscales contravencionales y, a pesar de que se lanzaron más de 100 bengalas, no fue suspendido.

"En ese recital, los fiscales supervisaron el cacheo y tomaron nota de las bengalas arrojadas. Lo llamativo es que en aquel momento no suspendieron el recital ni mucho menos", dijo el letrado.

También, Silvestroni afirmó que se intentará demostrar que el Gobierno de la Ciudad "no sólo no prohibía el uso de pirotecnia en los recitales, sino que lo fomentaba, tal como lo hizo en más de una oportunidad para promocionar los shows en los que tocaba Callejeros y que contaban con su auspicio".

Respecto de Chabán, los músicos asegurarán, según el abogado, "que era el responsable de que el boliche cumpliera con todas las normas de seguridad, entre ellas que la puerta de emergencias estuviera debidamente habilitada, que no hubiera una media sombra que recubría el techo y que tuviera elementos ignífugos"."Además, era quien decía cuánta gente entraba y el responsable de controlar o supervisar el ingreso de la gente al lugar", dijo.

Desde el entorno de Chabán siempre se afirmó que la noche de la tragedia era Callejeros quien puso 30 empleados de seguridad para controlar los accesos y realizar los cacheos que no detectaron las bengalas, pero desde la banda se afirma que sólo se trataba de "controles" cuya función era cuidar el armado de las colas externas, el escenario, los camarines y a los músicos.

Los integrantes del grupo de rock fueron citados a prestar declaración indagatoria como imputados por homicidio culposo en la causa en la que se investigan las 193 muertes del incendio que se produjo cuando tocaban en el boliche Cromañón de Bartolomé Mitre 3066 del barrio de Once, el 30 de diciembre del año pasado.

La tragedia se originó cuando un espectador encendió una bengala que prendió una media sombra que recubría el techo, lo que derivó en un humo tóxico que mató a casi 200 personas.

La citación al grupo surgió luego de que se conocieran dos grabaciones de entrevistas efectuadas por el periodista Juan Di Natale a integrantes de Callejeros en las que el baterista Eduardo Vázquez reconocía que tocaban en un show con más asistentes que los autorizados y festejó que el público utilizara pirotecnia.

Además de Vázquez, entre el lunes, martes y jueves próximos (el miércoles es feriado), deberán presentarse el cantante Patricio Pato Fontanet, el bajista Cristian Torrejón, el saxofonista Juan Carbone y los guitarristas Elio Delgado y Maximiliano Djerfy.En la causa, ya están procesados y estuvieron presos pero fueron excarcelados, dos integrantes de Callejeros: el manager Diego Argarañaz y el jefe de seguridad de la banda, Lorenzo Bussi.

Chabán fue detenido y procesado por el delito de homicidio con dolo eventual de 193 personas, al igual que el jefe de seguridad del boliche, Raúl Villarreal.

El empresario fue excarcelado el viernes pasado, aunque por decisión de su abogado no pagó la fianza y continúa en una celda de la cárcel de Marcos Paz hasta tanto la Cámara de Casación Penal confirme o revoque el fallo.También fueron procesados seis ex funcionarios del gobierno por no haber actuado ante las "reiteradas alarmas" que advertían sobre el funcionamiento irregular del boliche, y cinco policías federales por el presunto cobro de coimas para hacer la vista gorda sobre las irregularidades de seguridad. (Télam)