Año CXXXVIII Nº 48748
La Ciudad
Política
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Escenario
Economía
Señales
Turismo
Mujer


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 08/05
Mujer 08/05
Economía 08/05
Señales 08/05
Educación 07/05
Salud 04/05
Autos 04/05

contacto

servicios
Institucional

 domingo, 15 de mayo de 2005  
Elecciones 2005. El precandidato del PJ acusado de "clon" se defiende
La guerra de los Rossi promete más rounds
"Soy un viejo militante y él vino tarde", le responde el dirigente de Empalme Graneros al actual presidente del Concejo

Javier Felcaro / La Capital

Ni Dolly ni clon. "A mí me conoce todo el mundo. ¿Soy culpable de tener el mismo apellido?", se defiende Héctor Rossi, el militante justicialista de Empalme Graneros depositario de las sospechas de su homónimo Agustín Rossi, presidente del Concejo Municipal de Rosario y también precandidato a edil del PJ. Y desafía: "Represento a peronistas que se cansaron de que los usen. No los vamos a joder (a quienes lo acusan)... Ellos se jodieron solos".

El jueves pasado, el Rossi con despacho en el Palacio Vasallo había advertido sobre la inscripción, por parte de una agrupación justicialista, de un precandidato con su mismo apellido para competir en las internas abiertas. Si bien aclaró que no podía impedir la presentación, amenazó con recurrir a la Justicia electoral a fin de que las boletas tengan una clara identificación.

"Nacimos para la lucha porque es lo que nos enseñó Juan Domingo Perón. Ahora no podemos pararnos en medio del río", retruca el Rossi vecinalista, un albañil jubilado de 65 años, también conocido como Pelado en el populoso barrio de la zona noroeste de la ciudad.

El recelo que detonó la polémica se cimenta en la alquimia política y dos antecedentes tan rosarinos como el Monumento a la Bandera: la elección a concejal de 1997, cuando se enfrentaron los primos Bermúdez: Rubén (apodado el clon) y Carlos, actual defensor del pueblo provincial.

Después vinieron los comicios de 2001, cuando merced al ARI trucho (la agrupación se presentó como Ahora Reales Ideas) Sandra Cabrera cosechó los votos suficientes para acceder a una banca. El caso sigue siendo discutido en la Justicia, mientras que los ediles rechazaron la aprobación del diploma de quien terminaría siendo bautizada Dolly, por la oveja clonada.

Hace más de 40 años que Héctor milita en el PJ y, por esa razón, asegura ante La Capital que "cuando dicen que soy un trucho, me da risa". Por si acaso, recuerda que "la primera interna la gané yo con la lista 2, ¿así que no me conocen?".

Luego aprovecha para reivindicar a Bermúdez, el clon: "Lo acusaron de trucho pero vale diez veces más que ellos. Fue un señor concejal. Es mi amigo, aunque lo digo por su trabajo en el barrio. A los otros sólo se los conoce porque salen por televisión. ¿Por qué no vienen acá o a la villa? Tienen los medios y no lo hacen".

"Nuestra lista, Justicia y Trabajo, es de militantes. Está una compañera de 87 años que laburó toda su vida y no le dieron nada. Ni siquiera nos atienden en el Concejo", reprocha al instante, evidenciando el desaire con que -a su entender- les pagó la misma dirigencia que respaldaron en su momento.

Mientras ceba otro mate, dispara: "Nos usaron toda la vida. Rossi está en el Concejo por nosotros, por los votos que trabajamos. Por eso queremos poner en marcha la doctrina de Perón. Soy un viejo militante y él vino tarde".

Frente a la la luz de alerta encendida por el titular del cuerpo deliberativo, destaca que "a mí me conoce todo el mundo, no me pueden confundir, pero a él sí porque viene de otro partido. Yo no saqué los pies del plato".

Héctor muestra sus pergaminos como asesor de la Cámara de Diputados en la década del 80, congresal nacional y provincial y delegado departamental. Respecto a la vida interna del PJ, estuvo junto a Luis Rubeo, Eduardo Caíto Ceballos y el extinto Gualberto Venesia.

"No los vamos a joder... Ellos se jodieron solos. Este sistema nació ahora y habrá que ver si funciona o no, o si lo hicieron a su favor", advierte Rossi acerca del esquema electoral próximo a debutar. Tras considerar que la eliminada ley de lemas "sólo les sirvió a ellos", vuelve a pasar factura porque "en la última elección les dimos los votos y no nos tiraron ni un sándwich".

Los regaños parecen no tener fin al momento de hablar del papel desempeñado en los últimos años por los principales referentes del justicialismo santafesino. "Regalaron la Intendencia a cambio de la Gobernación. No sirven más", lanza como primer dardo.

También cuestiona al senador nacional Carlos Reutemann ("el ex presidente Carlos Menem lo puso, no es peronista") y aconseja al gobernador Jorge Obeid: "Veremos cómo hace para seguir. Lo mejor es que todos se pongan a solucionar los problemas del pueblo, que no es el mismo de hace 50 años".

"El PJ rosarino no le da pelea al socialismo por toda esta gente que nos ataca (en alusión al otro Rossi). Ellos representan el poder, pero tenemos los votos. Eso nos basta", sentencia.

No obstante, el Rossi de Empalme anticipa otro round: una conferencia de prensa programada para mañana, a las 19, en la sede partidaria. "¿Soy culpable de tener el mismo apellido? ¿No tengo derechos constitucionales? El peronismo está destruido y debemos volver con los viejos cuadros", ahora sí, concluye.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
Rossi, Gardel y Perón. "Cuando dicen que soy trucho me da risa".

  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados