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domingo,
08 de
mayo de
2005 |
Para leer: el recomendado de Marina Rubio
Marina Rubio (*)
Recomendar un libro es tan difícil cómo elegir una ciudad del mundo para conocerla. Sin embargo, hay una que visito seguido: Santa María. Quizá porque del otoño de las hojas de esa ciudad aprendí que "lo malo no está en que la vida promete cosas que nunca nos dará; lo malo es que siempre las da y deja de darlas". Esa es la ciudad de las novelas de Onetti, y la fatalidad del inmenso libro que es "La vida breve".
Leerlo es presentir en su ánimo la desolación de aquella Gertudris, desde el afán de Díaz Grey por precipitarse lealmente a sus propios suburbios, tropezando y advirtiendo en Elena esa última esquina donde se subraya el hambre por las ganas de volver a recibir lo que la vida deja de dar.
"Si acierto en algo le pido perdón". Onetti, es demasiado breve este imposible homenaje a la vida que usted me habita. Pero ojalá nunca tan breve la vida para impedirnos volver cada vez a Santa María.
(*) Licenciada en Comunicación Social
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