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 sábado, 30 de abril de 2005  
Rosario desconocida: Calles, cuadras y esquinas

José Mario Bonacci (*)

Se afirma que la estructura de calles en la mayoría de nuestras ciudades nace de la "cuadrícula española". Fue España quien introdujo con la conquista un sistema de calles paralelas cortándose en cruz. Los romanos instituyeron el sistema del "cardus" (dirección norte-sur) y el "decumanus" (dirección este-oeste). Fijaba el punto de corte a partir del cual se estructuraba un campamento o una ciudad. Pero haciendo justicia, debe aceptarse que Hipodamo de Mileto gestó el sistema en la Atenas de Pericles. El puerto del Pireo preocupaba al soberano por su crecimiento descuidado. A su pedido Hipodamo, arquitecto sabio, estudió el problema y sobrepuso al territorio esa trama neutra para sistematizarlo. Previó adaptaciones necesarias a irregularidades naturales y así estuvo presente la cuadrícula que rigió de ahí en más la conformación de las ciudades. Su empleo en nuestra América llegó por herencia a través del derrotero greco-romano-español.

Esa trama neutra respondía en muchos casos a geografías que exigieron adaptarse a diversos accidentes. La trama asentada en terreno plano, rodeada de pura pampa, confirma la capacidad de extenderse por el territorio sin freno alguno, hasta el infinito. Ese proceso fue cumplido al pie de la letra y con énfasis por la ciudad. A partir de ese concepto creció con los años sin prisa y sin pausa, hasta engullir vecinos que se fusionaron a la estructura descripta. Tal es el caso de Fisherton, Sorrento, Alberdi, Saladillo...

Resulta interesante estudiar la planta de ciudades con suficiente antigüedad. En el continente europeo se comprueba cómo el núcleo que le dio principio se diferencia fuertemente del crecimiento posterior por ser distintos el uno del otro. Barcelona tiene su centro antiguo abigarrado, irregular en la zona del barrio gótico y ramblas. Se distinguen calles estrechas, caprichosas algunas, de trazado casi libre. Traspuesta plaza Cataluña y alejándose del mar, rodea a este núcleo inicial el llamado "Ensanche Cerdá". Su rasgo fuerte es el uso de la cuadrícula comentada. Aparecen grandes avenidas y cruces remarcados por amplias ochavas con franca visual. Es un ejemplo de "cirugía urbana" y adecuación a nuevos tiempos, buscando adaptación y "costura" con la zona antigua de manera que ese contraste amistoso entre ambas es uno de los atractivos que la ciudad tiene.

Es notable cómo en el sector antiguo el nombre de calles rozan lo romántico. Un caso similar lo ofrece Sevilla: calle del Azúcar, callejón del Agua... Granada también aporta lo suyo: calle de los Mesones, Algibe de la Gitana, Calle Panaderos.... El genio italiano muestra en Florencia nombres llamativos: Vía dell"Oriuolo, Vía della Vigna Nuova, Vía del Campuccio... Son expresiones de culturas milenarias con respeto a las tradiciones, a los oficios, a los hitos que formaron a la ciudad.

En cambio Manhatan, menos temperamental, tiene un orden basado en números. Crecen de sur a norte y de este a oeste y sólo un 15% de sus calles llevan algún nombre. Se recorren fácilmente siguiendo el orden de crecimiento de la serie numérica natural. Quizás Broadway sea una de las pocas que se aparte del orden al seguir un camino marcado por los indígenas del lugar antes que arribaran los portugueses y luego los ingleses...


Destinos cercanos
En nuestro caso, al momento de la emancipación, con apenas doscientos años de historia nacional, se vislumbra un cambio. Nacen nombres propios con intención política e intereses precisos. Como curiosidad, resaltan presencias asociadas a la liberación cuando la Patria nacía y sus fuerzas contrarias. Dejan en claro oposiciones que llegan a ser tragicómicas y marcan diferencias en grupos que actuaron nefastamente enfrentados. En el sector de San Martín entre La Paz y bulevar Seguí se hallan algunos. Ayolas integró el dominio español que asoló indígenas, territorios y destinos. Su calle se mantuvo con ese nombre en todo el recorrido hasta variar en 1956 para llamarse Uruguay desde San Martín hacia el oeste. Ocampo y Viamonte no fueron lo que se entiende por patriotas. El Dean Funes fue delator, actuó contra Moreno y Belgrano asociado de alguna manera a Saavedra, cuyo aporte consistió más en jugar para Inglaterra y España, que para la Patria naciente. Sin embargo sorprenden todos estos nombres. "Se abrazan" con Mariano Moreno verdadero fuego de la Revolución de Mayo, al cruzarse a la vera del Parque Independencia.

Asociaciones inaceptables, acercamientos inauditos, cuando algunos fueron socios intelectuales en el asesinato de Moreno. Alvear se manchó para siempre ofreciendo el país al protectorado inglés. Mientras tanto, Castelli, "guardado" en una humilde cortada de 200 metros en barrio Tablada, no puede explicarse por qué Liniers, "héroe de la resistencia contra los ingleses" fue luego virrey de la mejor cepa corrupta. Con trayectoria opuesta a un buen ejemplo, goza con más de 2000 metros en la zona oeste de la ciudad. Y así podría continuarse con varios capítulos sorprendentes.


Hermanos latinoamericanos
Países hermanos latinoamericanos se agrupan en un círculo de unos 500 metros alrededor de avenida Circunvalación y Juan José Paso. Cuba casi olvidada, se recuesta en las vías del FF.CC. al lado del Village Rosario y aislada en Ludueña está República Dominicana. Detrás de la Estación Oeste Santafecino (Mendoza y Paraná), se agrupan otros nombres centro-americanos o caribeños como Honduras, Costa Rica, Jamaica, Haití... Y barrio Las Flores planta nombres como Petunia, Estrella Federal, Hortensia, Violeta y el masculino Heliotropo.

Más al oeste, en Puente Gallegos, se homenajea a renombrados balnearios como Punta del Este, Piriápolis, Atlántida, Viña del Mar, Copacabana, y Montecarlo, entre otros. El popular balneario Los Angeles tiene su calle de cuando el arroyo Saladillo en inolvidables picnics de primavera permitían gozarlo sin peligro de contaminarse para toda la vida...

Algunos escritores y poetas nacionales o extranjeros están dispersos por la ciudad. Un caso sorprende, como lo es el de Felipe Aldana, con breves 80 metros al oeste de Oroño al 4200. Seguramente nadie sabe allí que fue autor de aquello que afirma: "Para escribir un poema, uno solo, hay que estar enfermo de belleza"...

Pasando a nuestra lengua madre Cervantes Saavedra tiene sus 200 metros en Arroyito, y Sancho Panza lo dobla en distancia al oeste y detrás del Tiro Suizo. En cambio Don Quijote, el protagonista de la obra cumbre de la lengua castellana, espera que se acuerden de él ante la buena suerte que tuvieron su padre intelectual y su pícaro escudero... En Parquefield están los nombres de varios artistas plásticos, pintores y escultores....

Luego de este apresurado viaje por la trama urbana, cabe una reflexión. La gran mayoría ignora un número apabullante de nombres que se recorren a diario. La mezcla insólita de asociaciones en la nomenclatura y en el sentido de afirmar presencias y olvidar ausencias hace inentendible al cuerpo de la ciudad. La solución de este aquelarre es necesario, profundizando el conocimiento del lugar en que vivimos. No se puede amar aquello que ignoramos o que no guardamos debajo la piel. Un ejercicio formidable es munirse de una lupa y vagar tranquilamente por el plano que nos fija un lugar en el territorio. Los descubrimientos pueden llegar a ser atrapantes y encantadores...

¿Habrá llegado el momento de pensar, construir y difundir una verdadera guía urbana? Si así lo decidimos, debería contar con puntos básicos tales como identificación real de una calle en el plano respectivo, nombre, somera explicación y origen del mismo, ubicación real de lugares, actuación y merecimiento cuando se trate de personas en cualquier nivel de desempeño.

(*)Arquitecto / [email protected]


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