Cuerpos atractivos

Qué significa tonificar es una pregunta habitual en los gimnasios donde mujeres de todas las edades concurren con ese objetivo (aunque la mayoría de las veces los esfuerzos parecieran en vano). Lo primordial es tener en claro que para tonificar el cuerpo, o alguna de sus partes deben ocurrir dos fenómenos:

Reducción del tejido adiposo (masa grasa).

Incremento de la fuerza muscular.

Se puede observar gente fuerte pero sin tono muscular (o sin definición muscular evidente) porque tienen un elevado porcentaje graso, lo que no permite ver la masa muscular. En el otro extremo existen personas muy delgadas (producto de la implementación de dietas sin el acompañamiento de actividad física) que reducen la grasa pero no exhiben un tono muscular atractivo por el hecho de no tener fuerte sus músculos.

De manera que entrenar sin dietas y hacer dietas sin entrenar presupone esfuerzos que no reditúan. Según las experiencias y los estudios que hay sobre el tema, se puede afirmar que la solución al problema del tono muscular es la implementación de programas de entrenamiento de fuerza acompañado de dietas correctamente equilibradas, y bajas en contenido graso (tema que compete a los nutricionistas).

Lo primero es desmitificar el entrenamiento con pesas en los gimnasios porque pareciera que las mujeres estarían imposibilitadas para hacer fuerza; es común verlas realizando ejercicios con muchas repeticiones y pocos kilos. Esto sólo es un tabú socio cultural porque las mujeres pueden hacer tanta fuerza como los hombres.

Lo que se ve habitualmente en los gimnasios cuando se entrena con poco peso y muchas repeticiones es un entrenamiento de fuerza-resistencia del que se obtienen resultados a corto plazo, pues el organismo progresa al tener que movilizar una carga externa a la que no estaba habituado. El problema surge luego de las primeras 8 ó 12 semanas porque los músculos involucrados dejan de recibir estímulos suficientes como para seguir mejorando debido a que los pesos que se pueden manejar son extremadamente bajos (si se hacen muchas repeticiones no es posible levantar grandes pesos).

Una propuesta válida es entrenar la fuerza máxima en vez de fuerza-resistencia debido a los beneficios de este entrenamiento para mejorar la fuerza y perder grasa. Entre ellos se mencionan:

Los grandes pesos reclutan una mayor musculatura y promueven una buena tonificación (músculos marcados y duros al tacto).

Al hacer pocas repeticiones se limita la hipertrofia muscular (los músculos se ponen fuertes pero no crecen de tamaño).

Los estímulos de este tipo (fuerza máxima) incrementan la respuesta hormonal, especialmente de la testosterona que combate el tejido celulítico y promueve la eliminación de grasas.

Los músculos se tornan más fuertes y aumentan su peso molecular (que no se ve reflejado en el tamaño) lo que los hace metabolicamente activos y provoca que "gasten" más energía para su actividad normal.

Para esta práctica se requiere de personal cualificado para impartir rutinas que resulten verdaderamente eficaces y que enseñen qué tipo de ejercicio hacer para obtener óptimos resultados.

Román Gorosito
Especialista en entrenamiento de fuerza
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